Hoy Sábado Santo la Iglesia permanece junto al Sepulcro de su Señor, meditando su Pasión, su Muerte, su Descenso a los infiernos y esperando, en la oración y el ayuno, su Resurrección.
Hoy es un día especialmente dedicado a la oración ante la cruz de Jesucristo y reflexionar sobre el sentido redentor de su entrega hasta la muerte por la salvación del mundo.
La liturgia de hoy nos invita a vivir la lealtad y la fidelidad. La lealtad está asociada a la fidelidad, alguien leal como Dios quieres, alguien que no te da la espalda, ni con actitudes, ni en pensamientos.
Hoy Martes Santo, la liturgia nos invita a reflexionar sobre la soledad de Jesús y la perplejidad que su anuncio nos puede generar a nosotros también y cómo el pecado puede llevarnos a traicionarlo.
Este día la liturgia nos invita a reflexionar acerca del Siervo de Yahvé, El como nuestra luz y salvación y la importancia que nuestra vida esté centrada en Cristo, en ungirlo con nuestros mejores perfumes.
Domingo de Ramos, día para meditar como Jesús ha subido voluntariamente a Jerusalén sabiendo perfectamente que allí moriría de muerte violenta a causa de la contradicción de los pecadores.