Espíritu de Dios, ven y obra con tu poder en mi alma e ilumíname para no dejarme llevar por situaciones complicadas que quieran robarme la paz. Ven, Espíritu de poder y enciende en mí el fuego sagrado de tu amor para ser sanado de todo sentimiento negativo que me hace perder el equilibrio.
Líbrame de toda vanidad y del falso orgullo que hacen que me convierta en acusador y juez de los demás ganándome el desprecio de muchos. Ven Señor, derrota con tu poder todo sentimiento hostil que habite en mi corazón. Quiero desechar todo deseo malsano que me separa de Ti.
Ayúdame a reconocer el verdadero valor de tus Sacramentos, en especial el del Matrimonio construido sobre Ti, que es indisoluble y reflejo de tu unidad y de tu bondad. Que tantas familias que hoy se encuentran separadas, puedan encontrar en Ti el consuelo en medio de la prueba y fortaleza en medio de su debilidad.
Ayúdame a vivir mi vocación siempre llevada de la mano de tus enseñanzas y en tu dirección. Sólo Tú puedes dirigir con precisión el rumbo de mi vida. Te entrego todo de mí, mis sueños, mi cónyuge, mis hijos. Bendícelos y junto con María, dame la fuerza para nunca sucumbir en la adversidad. Amén
Propósito para hoy.
Dios está allí escuchando nuestros ruegos en la necesidad; pero hay que estar consciente de que hay algunas razones bíblicas por las que Dios no escucha nuestra oración. Estúdialas y cuida que nunca caigas en esa condición.
Frase de reflexión.
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p data-originalfontsize=”17px” data-originalcomputedfontsize=”17″>”Es un don, es un carisma la profecía y se le debe pedir al Espíritu Santo: que yo sepa decir esa palabra, en aquel momento justo”. (Papa Francisco)
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Agosto 2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.