Dios de mi vida, quiero entregarte hoy mi corazón para que lo restaures y lo hagas florecer, obres en él y lo moldees según tu conveniencia.
Siguiendo tus pasos, nada puede causarme dolor, porque Tú me fortaleces y llenas mi espíritu de ánimos para luchar con todas las fuerzas de mi corazón.
Quiero descubrirte en mi pequeñez y darte a conocer, no con grandes discursos, sino con pequeños actos de amor que muestran tu compasión.
Irrumpe amorosamente con todo tu poder en mi vida y haz que arda en deseo profundo de darte a conocer y alegrarme de tus maravillas.
Sintiéndome acogido por la ternura del Niño a Dios, quiero llevar su mensaje de salvación con alegría, dando esperanzas a los corazones entristecidos
Acepto tu propuesta de felicidad y tu deseo de germinar en mi vida. Estoy seguro de que, tomado de tu mano, nada podrá hacerme desfallecer.
Te pido que vengas y cuides de los míos, llénalos de tu alegría, esa alegría que rompe las dificultades y hace superar las divisiones y diferencias.
Abro mi vida y mi corazón a tantas cosas buenas que provienen de Ti. Gracias mi Dios. Confío en Ti y en la frescura de tu dulce amor. Amén
Propósito para hoy
Prepararme espiritualmente para realizar, lo más pronto posible, una buena confesión, haciendo un examen de conciencia sobre mis acciones con los demás
Frase de reflexión
“No podemos ser cristianos por instantes. Busquemos vivir nuestra fe en cada momento, cada día”. Papa Francisco.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Diciembre 2019
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.