Señor, Tú has llenado mi corazón de esperanza desde aquel día en que me comprometí a servirte y a dar la batalla por ganarme un espacio en tu Reino.
Gracias por todos los dones que me has entregado, y por todo aquello que has sembrado en mi vida, que me ha permitido alcanzar la felicidad.
Gracias por tu amor, por regalarme tu presencia y por estar a mi lado haciéndome sentir amado y afortunado de contar con tu poder y tu gracia.
Quiero vivir confiado y agradecido, y para ello recurro al poder del Espíritu Santo para no apartarme de tu camino cuando me quede sin fuerzas.
Líbrame de la soberbia y el orgullo, enemigos mortíferos del alma. Aparta de mi mente todo pensamiento de desánimo que me haga sentir derrotado.
Quiero darte lo mejor de mí en cada situación de vida, en cada palabra y gesto. Quítame toda sensación de angustia y dolor, de miedo e inseguridad.
Estoy en tus manos, Tú me proteges, confío en tu amor y en que tus santos ángeles me muestran el camino a seguir con sabiduría y serenidad.
Gracias por amarme y por acompañarme todos los días manifestándome lo valioso que soy para Ti. Te amo y confío en tu providencia santa. Amén
Propósito para hoy
Compraré o prepararé un almuerzo o merienda para una persona en condición de calle y le daré la bendición al entregárselo
Frase de reflexión
“En la cruz de Jesús se puede ver toda la fuerza del mal, pero también toda la omnipotencia de la misericordia de Dios”. Papa Francisco.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Abril 2019
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.