El evangelio de Marcos 1:1-8 cuenta la historia de Juan el Bautista, quien fue el precursor de Jesús. Juan vivía en el desierto y predicaba a la gente que se arrepintieran de sus pecados. Él les decía que Jesús, el Mesías, estaba a punto de venir.
El pasaje comienza con una cita del profeta Isaías. Isaías dijo que Dios enviaría a un mensajero para preparar el camino para el Mesías. Este mensajero era Juan el Bautista.
Juan predicaba a la gente que se arrepintieran de sus pecados. Esto significa que debían admitir que habían hecho cosas malas y que debían dejar de hacerlas. Juan les decía que el Mesías estaba a punto de venir y que Él los perdonaría sus pecados.
Juan bautizaba a la gente en el río Jordán. El bautismo es un símbolo de limpieza y renovación. Cuando la gente se bautizaba, estaba mostrando que estaba dispuesta a dejar sus pecados atrás y a seguir a Jesús.
Recuérdele al niño que Juan el Bautista era el hijo de Isabel, prima de Maria a quien María visitó cuando estaba embarazada de Jesús. Explique que Juan era un bebé milagroso ya que sus padres eran demasiado viejos para tener hijos y aun asi Dios los bendijo con un hijo. Hable acerca de cómo el ángel se le apareció al padre de Juan en el templo y le dijo que Juan nacería. Explique que Juan tenía un trabajo muy importante que hacer. Su trabajo consistía en preparar el camino para Cristo. Pregúntele al niño si sabe lo que significa preparar. Para ilustrar, seleccione una receta de algún tipo. Esto puede ser cena, postre o un refrigerio especial. Antes de comenzar, coloque los ingredientes. (Para fines ilustrativos, una receta que use elementos como harina, bicarbonato de sodio u otros elementos que no son buenos antes de la preparación, sería lo mejor). Pregúntele al niño si la harina u otros elementos están listos para comer. Cuando comience a preparar la receta, pregúntele al niño, durante todo el proceso, si la receta está lista.
Explique que la receta solo estará lista en el momento adecuado, cuando todos los ingredientes estén mezclados y horneados.
Hable acerca de cómo, al igual que los ingredientes, Dios seleccionó un tiempo y personas para preparar el camino para Su Hijo.
Pregúntele al niño si sabe cómo Juan preparó el camino para Cristo. Señale que predicó sermones y le dijo a la gente que Jesús vendría. Explique que un pastor predica sermones en la iglesia. Si el niño tiene edad suficiente, puede preguntarle de quién habla el pastor en la iglesia. Pregunte si el pastor habla de sí mismo, de los dibujos animados o de Jesús. Explique que, al igual que un pastor, el trabajo de Juan era hablar de Jesús, no de sí mismo. Explique que nosotros también estamos llamados a hablar sobre Jesús. Explique que Juan predicó sobre la necesidad del arrepentimiento. Explique que el arrepentimiento es lamentar las cosas incorrectas que hemos hecho y dejar de hacerlo. Hable acerca de cómo el arrepentimiento significa girar e ir en la dirección opuesta. Explique que Juan se llamaba Juan el Bautista porque bautizó a las personas. Si el niño ha sido testigo de un bautismo, puede usarlo como ilustración. También puede elegir reproducir un video en línea de un bautismo o simplemente explicar lo que sucede.
Discuta cómo el bautismo es una imagen de nosotros muriendo a nuestro yo pecaminoso y resucitando a una nueva vida en Cristo. Explique que el bautismo no nos salva, sino que es una representación de ser salvos. Para ilustrar, use un teléfono o una cámara. Puede elegir tomar fotos con anticipación o ayudar a su hijo a tomar fotografías.
Hable acerca de cómo las fotos no son el objeto real, sino representaciones del objeto real. Usa al menos una foto de comida (si hiciste la receta anterior, esta sería una excelente opción). Señale la imagen de la comida y pregúntele al niño si esa comida satisfará su hambre. Pregunte si la foto de su cama les permitirá descansar. O si la foto del agua les ayudará a lavarse las manos. Use esta ilustración para explicar que el bautismo es una imagen de lo que Cristo ha hecho por nosotros, pero en sí mismo no puede salvarnos. Regocíjense juntos de que Jesús vino al mundo. Puede hacer esto con una canción, oración o discurso. Ora y agradece a Dios por Cristo. Pídale que lo ayude a ser como Juan y comparta las Buenas Nuevas con otros.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Diciembre 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.