?⛅️ Buenos días. “Señor enséñame a amar como tú nos has amado“. Papa Francisco.
https://youtu.be/mOROJrPrzqQ
- Apoc 12, 7-12, o bien, Dan 7, 9-10. 13-14
- Sal 137
- Jn 1, 47-51
Hoy celebramos a Los Santos Arcángeles San Miguel, San Gabriel y San Rafael. Cabe aclarar que la angeología es la parte de la teología que estudia la doctrina sobre Los Ángeles. El Catecismo no entra en la angeología. Pero te animo a que leas los puntos 328-336, donde se recoge lo esencial de nuestra fe en los ángeles.
El texto de Daniel que también se puede proclamar hoy, nos comenta Fray Juan José de León Lastra O.P, indica que alguien como un hombre, recibirá el poder, el honor y el reino. Un poder eterno. Que la Iglesia en su liturgia, interpreta como el anuncio de la presencia de Jesús , “que será el hijo del Altísimo”, como anuncia el arcángel Gabriel a María.. De este modo la fiesta de estos arcángeles sirve para proclamar la grandeza singular, la excelencia máxima de Jesús de Nazaret. Y también la fe católica entenderá a María como “reina de los ángeles”.
En el texto del evangelio nos dice Cardenal Jorge MEJÍA Archivista y Bibliotecario de la S.R.I. , que Jesús manifiesta a sus Apóstoles y a todos la presencia de sus ángeles y la relación que con Él tienen. Los ángeles están en la gloria celestial, donde alaban perennemente al Hijo del hombre, que es el Hijo de Dios. Lo rodean y están a su servicio.
«Subir y bajar» nos recuerda el episodio del sueño del Patriarca Jacob, quien dormido sobre una piedra durante su viaje a la tierra de origen de su familia (Mesopotamia), ve a los ángeles que “bajan y suben” por una misteriosa escalera que une el cielo y la tierra, mientras Dios mismo está de pié junto a él y le comunica su mensaje. Notemos la relación entre la comunicación divina y la presencia activa de los ángeles. Y concluye, aprendamos de esta celebración de los arcángeles que “suben y bajan” sobre el Hijo del hombre, que sirven a Dios, pero le sirven en beneficio nuestro. Dan gloria a la Trinidad Santísima, y lo hacen también sirviéndonos a nosotros. Y, en consecuencia, veamos qué devoción les debemos y cuánta gratitud al Padre que los envía para nuestro bien.
Nos explica el Papa Francisco que “Satanás siempre busca destruir al hombre. Es astuto: lo dice la primera página del Génesis; es astuto. Presenta las cosas como si fueran buenas. Pero los ángeles nos defienden. Defienden al hombre y defienden al Dios-Hombre, al Hombre más grande que ha existido, a Jesucristo que es la perfección de la humanidad, el hombre más santo. Nosotros, si no luchamos, seremos derrotados. Afortunadamente la función de auxiliarnos en esta lucha el Señor la ha encomendado principalmente a sus ángeles: luchar para vencer. El oráculo del Apocalipsis que describe esta dura batalla, concluye en este hermoso modo: «Ahora se han cumplido la salvación, el poder y el Reino de nuestro Dios y la soberanía de su Mesías porque ha sido precipitado el acusador de nuestros hermanos, el que día y noche los acusaba delante de nuestro Dios. Ellos lo han vencido gracias a la sangre del Cordero y a la palabra del testimonio que dieron, porque no amaron su vida ante la muerte. Por eso, que se alegren los cielos y los que moran en sus tiendas».
Afirma un comentario con motivo esta Celebración que entre los ángeles hay diversos grados, dependiendo de la importancia de la obra que realizan. Teniendo en cuenta los millones de ángeles creados, trabajar al servicio de Dios en realidad se convierte en la empresa logística más grande del mundo, y como tal, debe estar mejor organizada que Amazon, con un entretejido bien estructurado y escalonado de funciones y cometidos.
Celebramos la fiesta de los Santos Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael, tres personajes que aparecen en momentos diversos de la historia de salvación para traer el buenas nuevas a la humanidad. El anuncio de la encarnación del Mesías culmina esas intervenciones de los arcángeles. Quizá haya más arcángeles, pero no aparecen citados nominalmente en la Escritura; sus nombres forman parte de la tradición, pero la Iglesia ha querido centrar la mirada en aquellos cuyos nombres y cometidos están contenido en la Biblia.
Su terminación común “El” nos indica el fin de su existencia, el servicio de Dios y su adoración permanente; en el Antiguo Testamento es la abreviatura de Dios: “El” es “Elohim”.
San Miguel significa “¿Quién como Dios?”. Ataviado con escudo y espada, defiende la causa de Dios comandando como general en jefe las legiones de ángeles contra la Serpiente y sus secuaces, que encadenan a la humanidad para que no conozca y no sirva a Dios. De modo especial, cuida del papa y de los obispos, sucesores de los Apóstoles, garantes de la fe. Ayuda a la Iglesia en su constante guerra contra los peligros internos y externos.
San Gabriel significa “Fortaleza de Dios”. Nos ayuda a poner nuestra esperanza en la Palabra, el Verbo encarnado. Desde que María dijo “sí” a Rafael, esa palabra divina adquiere unas cualidades inusitadas que va mucho más allá de lo espiritual: el Verbo (la Palabra) se hizo carne, y acampó entre nosotros. En la Sagrada Escritura el Verbo nos habla. Por esta razón es siempre nuestro libro de cabecera, lo leemos, lo meditamos, lo estudiamos. Son palabras de vida eterna.
San Rafael significa “Medicina de Dios”, y es protagonista en el libro de Tobías: “Dios envió al ángel Rafael para curarlos: a Tobit, para que desaparecieran las manchas blanquecinas de sus ojos y pudiera contemplar la luz de Dios; a Sara, hija de Ragüel, para darla en matrimonio a Tobías, hijo de Tobit, liberándola del malvado demonio Asmodeo (Tb 3,17). En el camino de la vida, necesitamos la acción sanante de Dios. A veces, a través de milagros físicos, pero sobre todo a través de los milagros que no se ven: la paz en medio de la tempestad, la reconciliación en medio de las contiendas, la conversión en la caída, la luz de la fe en después de la oscuridad de la incredulidad, la fidelidad después de la niebla de dudas…
Palabra de Vida Mes de Setiembre 2021
“El que quiere ser el primero, debe hacerse el último de todos y el servidor de todos” (Marcos 9, 35) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida
Bendigamos al Señor con nuestro testimonio este día y digámosle:
"Me siento fuerte, sano y feliz porque tengo fe, amor y esperanza".
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Recopilado por Rosa Otárola D, /
Setiembre 2021
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.