https://youtu.be/_k3t0rTtM0g
- Sab 12, 13. 16-19
- Sal 85
- Rom 8, 26-27
- Mt 13, 24-43
Hoy la línea general de la Liturgia, gira en torno a la bondad de Dios. El siempre nos ofrece la oportunidad para cambiar. El muestra su poder con delicadeza, como lo vimos en la primera lectura: “Siendo tu el dueño de la fuerza, juzgas con misericordia y nos gobiernas con delicadeza”. Qué diferente es su actuación a la nuestra. Dios no quiere la muerte del pecador, pues El ama a todos, por eso tiene compasión, amor y lealtad, como lo acabamos de leer en el Salmo.
“El Espíritu acude en ayuda de nuestra debilidad, pues nosotros no sabemos pedir como conviene”, nos dice San Pablo en el texto a los Romanos. El Señor, nos ofrece su ayuda, pues como consecuencia de nuestras limitaciones, no sabemos elegir. En el proceso de dejarnos transformar para ser trigo bueno, en el que Dios mismo va sanando nuestra propia cizaña, es fundamental reconocer nuestra debilidad.
Nos explica el Papa Francisco que esta parábola, “presenta dos modos de actuar y de vivir la historia: por un lado, la mirada del amo, que ve lejos; por otro, la mirada de los siervos, que ven el problema. Los criados se preocupan por un campo sin malezas, el amo se preocupa por el buen trigo. El Señor nos invita a asumir su misma mirada, la que mira al buen trigo, que sabe custodiarlo también en las malas hierbas. No colabora bien con Dios quien se pone a la caza de los límites y de los defectos de los otros, sino más bien quien sabe reconocer el bien que crece silenciosamente en el campo de la Iglesia y de la historia, cultivándolo hasta la maduración. Y entonces será Dios, y solo Él, quien premie a los buenos y castigue a los malvados.”
En cuanto a la parábola del grano de mostaza, nos indica el Pontifice: “La imagen del grano de mostaza. Si bien es el más pequeño de todas las semillas está lleno de vida y crece hasta volverse ‘más grande que todas las plantas de huerto’.
Así es el reino de Dios: una realidad humanamente pequeña y aparentemente irrelevante. Para entrar a ser parte es necesario ser pobres en el corazón; no confiarse en las propias capacidades sino en la potencia del amor de Dios; no actuar para ser importantes a los ojos de mundo, sino preciosos a los ojos de Dios, que tiene predilección por simples y los humildes.”
Y en la del puño de levadura, el tema central aquí es la expansión del reino de Dios. Jesús estaba hablando de como el reino de Dios se extendería de la misma forma como ocurre con la levadura en la harina y la hace crecer. Y aunque la levadura en otras partes de las Escrituras, representa la influencia del mal, en este contexto hace referencia a la buena noticia que se proclamaría y transformaría a hombres y mujeres en diferentes lugares del mundo.
Continúa el Papa, “…de estas dos parábolas nos viene una enseñanza importante: el Reino de Dios pide nuestra colaboración, si bien es sobretodo iniciativa y un don del Señor. Nuestra débil obra aparentemente pequeña delante de los problemas del mundo, si se inserta en la de Dios y no tiene miedo de las dificultades.
La victoria del Señor es segura, su amor hará crecer cada semilla de bien presente en la tierra. Esto nos abre a la confianza y al optimismo a pesar de los dramas, las injusticias, y los sufrimientos que encontramos. La semilla del bien y de la paz germina y se desarrolla, porque lo hace madurar el amor misericordioso de Dios.”
Tenemos que acostumbrarnos a vivir como santos en medio de pecadores, a dar más fruto que los malos e incluso a ser más fuertes, por si vienen épocas de sequía sean los enemigos de Dios lo que se sequen. Ciertamente tenemos que buscar parroquias o comunidades que nos ayuden a que no nos ahogue la cizaña, a recibir el riego suave del Espíritu Santo que acude en ayuda de nuestra debilidad y el Señor pueda recoger nuestro fruto para seguir sembrando.
Pidamos con la Oración de los Fieles: para que los cristianos veamos el bien que crece aun en medio de las dificultades; para que nadie se frustre al constatar que el mal sigue presente en el mundo; para que las personas sepa creer en todo el bien del somos capaces y para que no dejemos de luchar por un mundo más acorde a la Voluntad de Dios.
Que La Virgen María nos ayude a comprender e imitar la paciencia de Dios, que no quiere que ninguno de sus hijos se pierda, que Él ama con amor de Padre.
Fuentes:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/pautas/
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2023/07/23/menudo-huerto/
- https://www.vatican.va/content/francesco/es/angelus/2020/documents/papa-francesco_angelus_20200719.html#:~:text=Mt%2013%2C%2024%2D43),nuestro%20coraz%C3%B3n%20a%20la%20esperanza.
- https://es.catholic.net/op/articulos/9245/cat/347/el-reino-de-dios-como-la-levadura.html#modal
- https://www.elmensajedejesus.org/recursos/las-parabolas-de-jesus/472-la-parabola-de-la-levadura-mateo-13-33-lucas-13-20-21.html
Palabra de Vida Mes de Julio 2023
“Les aseguro que cualquiera que dé de beber, aunque solo sea un vaso de agua fresca, a uno de estos pequeños por ser mi discípulo, no quedará sin recompensa.” (Mateo 10, 42) https://ciudadnueva.com.ar/julio-2023
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Junio 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.