?⛅️ Buenos días. “Señor enséñame a amar como tú nos has amado“. Papa Francisco.
- 1 Tes 4, 13-18
- Sal 95
- Lc 4, 16-30
San Pablo les explica a los de tesalonica, la gran esperanza cristiana, el saber que nuestra vida en el mundo es sólo un tránsito hacia la vida definitiva que tendremos y que gozaremos en el cielo.
Vivir está vida en cristiano pues, no es sufrir aquí para ser felices en el más allá, sino anticipar con nuestro estilo de vida aquí, la plenitud feliz de la otra. Aceptar así la limitación de la felicidad, como de la bondad, porque se espera la plenitud en el más allá. Esto nos motiva a cantar al Señor con alegría, a regocijarnos ante El.
El evangelio nos confronta, como nos indica el padre Yepes en el audio, con nuestra dificultad para aceptar la buena obra que otros realizan que nos lleva a actitudes nefastas de rivalidad, competencia, celos, envidias, etc.
El Papa Francisco nos lo deja claro: “Después de una primera reacción positiva, alguno movido por la polilla de la envidia comenzó a decir: ¿Dónde estudió éste? ¿No es el hijo de José? Y nosotros conocemos a toda su familia, ¿y en qué universidad estudió? Entonces pretendían que le hiciera un milagro: solamente después habrían creído. Entonces comenzaron a empujarlo para tirarlo por un barranco por celos, por envidia.
Pero no se trató de un evento de hace dos mil años atrás, esto sucede cada día, cada vez que se acoge a alguien hablando bien el primer día y después siempre menos, hasta llegar a la habladuría, casi hasta desollarlo. Quien en una comunidad habla contra un hermano acaba por querer asesinarlo.
El apóstol Juan nos dice esto: quien en su corazón odia a su hermano es un homicida. Nosotros estamos acostumbrados a los chismes, a las habladurías y muchas veces transformamos a nuestras comunidades y también a nuestra familia en un infierno en donde se manifiesta esta forma de criminalidad que lleva a asesinar al hermano y a la hermana con la lengua.
Para que haya paz en una comunidad, en una familia o en un país, en el mundo, tenemos que empezar a estar con el Señor…”
Mes de se timbre
Confesarse
Confiésate y empieza de Nuevo. La confesión es un Sacramento de sanación ¿Por qué no lo aprovechas para un nuevo comienzo, dejando atrás los rencores y dolores del pasado?. La confesión de ta el impulso a una nueva vida, el Señor te lo ha regalado para que te acerques a Él limpio y renovado.
Bendigamos al Señor con nuestro testimonio este día y digámosle:
"Me siento fuerte, sano y feliz porque tengo fe, amor y esperanza".
? ?
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Abril 2019
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.