- Hch 28,16- 20. 30-31
- Sal 10
- Jn 21, 20-25
Hoy la Oración colecta nos invita a pedir al Señor que nos conceda que quienes hemos celebrado estas fiestas pascuales mantengamos, por tu Gracia, su efecto en nuestra conducta y en toda nuestra vida. Y es que en la Pascua nuestra alegría tiene memoria: al volver la mirada a la cruz y al sepulcro, el cristiano recuerda de dónde Dios lo ha sacado, de todo lo que le ha perdonado, la Gracia de Dios se ha derramado sobre cada uno de nosotros y eso nos da nuevas fuerzas para caminar en la verdad y evangelizar en todo momento, sin poner objeciones pues la salvación sigue desplegándose también es esta época que nos toca vivir, gracias aquellos que nos dejaron plasmada en la Palabra toda enseñanza dada por Jesús.
En la primera lectura vemos como San Pablo tenía clarito que a cualquier seguidor de Jesús le podía pasar lo que a su Maestro y Señor.
Pablo “ante los principales de los judíos” intenta probarles su inocencia y se atreve a predicarles ¡cómo no! a Jesucristo. Y pasa lo de siempre, unos aceptan su predicación y otros la rechazan. Eso no le quita su empeño evangélico. Sabe bien que Jesús es “el camino, la verdad y la vida”, que era la mejor noticia que podía difundir para alegrar el corazón de sus oyentes
Afirma el Papa Francisco explicándonos el texto del evangelio de hoy que “el amor de Jesús debe ser suficiente para Pedro. Él no debe ceder a la tentación de la curiosidad, de la envidia, como cuando, al ver a Juan cerca de allí, preguntó a Jesús: «Señor, y éste, ¿qué?». Pero Jesús, frente a estas tentaciones, le respondió: «¿A ti qué? Tú, sígueme». Esta experiencia de Pedro es un mensaje importante también para nosotros.
El Señor repite hoy a cada uno de nosotros: “Sígueme. No pierdas tiempo en preguntas o chismes inútiles; no te entretengas en lo secundario, mira lo esencial y sígueme. Sígueme a pesar de las dificultades. Sígueme en la predicación del Evangelio. Sígueme en el testimonio de una vida que corresponda al don de la gracia del Bautismo. Sígueme en el hablar de mí a aquellos con los que vives, día tras día, en el esfuerzo del trabajo, del diálogo y de la amistad. Sígueme en el anuncio del Evangelio a todos, especialmente a los últimos, para que a nadie le falte la Palabra de vida, que libera de todo miedo y da confianza en la fidelidad de Dios. Tú, sígueme.”
El Salmo nos dice que “el Señor verá a los justos con complacencia”, entonces aunque a veces quiera perder el tiempo en preguntes, chismes, desánimo, como a Pedro el Señor me dice “Sígueme” y como Pedro nunca me rendiré.
Me encanta esta frase de Facundo Cabral: Dios no te prometió días sin dolor, risa sin tristeza, sol sin lluvia, pero si te prometió fuerzas para cada día, consuelo para cada lágrima y luz para caminar.
La vida es el regalo que Dios nos hace. El modo en que la vivimos es nuestro regalo a Dios. Hay que hacer de la vida diaria un fantástico regalo para El.
Que este ultimo día de Pascua, nos lleve mañana a vivir Pentecostés y nos haga pedir con sinceridad cada día, la llegada del Espíritu Santo. Que venga y renueve la faz de la tierra. Que renueve el ardor y el amor en su Iglesia. Y que renueve cada nuestra mente para que no nos acomodemos a este mundo y podamos vivir en las categorías de Dios.
Textos Consultados:
- Folleto La Misa de Cada Día
- Libro Busco Tu Rostro. Autor Carlos G. Vallés
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2024/05/18/a-ti-que-tu-sigueme/
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://regnumchristi.org/es/sabado-22-de-mayo-de-2021-tu-sigueme/
Palabra de Vida Mes de Mayo 2024. “Quien no ama, no ha conocido a Dios porque Dios es Amor.” 1Jn 4, 8
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Mayo 2024.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.