Este día es de vigilia; tiempo de demostrar la humildad y sencillez al prójimo como Jesús lo hizo al lavar los pies a sus discípulos, a tener una actitud de servicio, una conciencia clara de vivir el mandato del amor, y una acción de gracias por la Eucaristía y el Sacerdocio Ministerial; en este día los sacerdotes renuevan sus votos de vida para con la Iglesia. También se realiza la bendición de los óleos que se utilizarán en las ceremonias de bautizos, unción de los enfermos y ordenaciones sacerdotales.
También recordamos la traición de Judas, cuando lo entregó con un beso, y la oración en Huerto de Getsemaní, en donde se dio su prendimiento.
Es uno de los días más hermosos de la Semana Santa, no es el principal, pero sí uno de los más hermosos y tienen cuatro ideas principales.
La primera idea principal tiene que ver con la mañana del Jueves Santo, la misa crismal con la que termina la cuaresma. La cuaresma empieza el Miércoles de Ceniza y termina el Jueves Santo en la mañana con la misa crismal.
¿Qué cosa es la misa crismal? Es la misa donde todos los fieles están unidos a sus sacerdotes, todos los sacerdotes están unidos a sus obispos y todos los obispos están unidos al Papa. Es la misa de la unidad de la Iglesia y donde se consagra y se bendice los aceites que van a ser usados en los sacramentos del bautismo, de la confirmación, de la unción de los enfermos, del orden sacerdotal.
Se consagra el óleo de los catecúmenos, se consagra el óleo de los enfermos, se consagra el Santo Crisma, que sirve para el bautismo, la confirmación y el orden sacerdotal. Esta es la primera idea: la iglesia tiene que manifestar la unidad. Cuando tú veas gente que va en contra de su obispo, de su pastor, del Papa, simplemente no es católica y no hay que hacerle mucho caso. A los curas que no están unidos a los obispos y al Papa, no hay que hacerles mucho caso.
A la gente que critica al Papa, no hay que hacerle mucho caso, porque no son cristianos, no son católicos, en todo caso pueden fundar su iglesia y no tendrían ningún problema con ellos.
La Iglesia es una unidad; unidad en la diversidad, pero una unidad, y debemos dar esa imagen. La antigua iglesia primitiva era reconocida por el amor, no había cuellitos de curas, velos de monjas, crucecitas, no había nada de eso.
La gente decía “miren cómo se quieren”. Ese era el distintivo de los cristianos, el AMOR, y sigue siendo hoy, dos mil años después, es el mismo distintivo, no cambia. De qué vale que yo tenga un cuellito de cura o tenga una sotana si me falta el amor; de qué vale que un obispo esté lleno de púrpura, lleno de cosas si no huele a oveja como su gente. Entonces, lo primero es la unidad, esta es la primera idea de Jueves Santo.
Una segunda idea de Jueves Santo es el Día del Sacerdote. Así es, amigo, día de tal vez saludarlo, pero necesario de rezar por aquellos sacerdotes que te han hecho el bien. También podrías rezar por aquellos sacerdotes que te han escandalizado, que no han cumplido su tarea. Sí, en lugar de criticarlos, reza por ellos,
Hay sacerdotes que entregan su vida todos los días, en los recónditos lugares del mundo predicando el evangelio, y tenemos que tener un recuerdo de ellos; también rezar por las vocaciones. Entonces el día Jueves Santo es día de rezar por los sacerdotes y, sobre todo, por aquellos que en silencio entregan su vida día a día para que otros sean felices.
Una tercera idea fundamental es el día de la Eucaristía.
La Eucaristía es el acto, uno de los actos más grandes de amor de Cristo; el acto de Jesús que se queda con nosotros. Esa es la misa. Cristo se queda con nosotros como alimento, como fuerza, como el amigo que nunca falla; entonces, entender la Eucaristía, es entender la amistad con Jesús. Yo voy a misa. No es porque es una obligación, no, yo voy a misa porque el que da su vida por mí en cada Eucaristía, es el mismo que el Domingo de Ramos la multitud lo seguía porque había algo en El que lo atraía, lo animaba, despertaba algo nuevo dentro, a tal extremo que la gente decía de Él, “Bendito el que viene en nombre del Señor”. El Es mi amigo! El que me amó y me ama que da la vida por mí.
Por eso, si yo no soy amigo personal de Jesucristo, la misa no me dice nada, simplemente es una serie de ritos, a veces incomprensibles, que sirven poco o nada. Las personas que no entienden la amistad con Jesús, deben quedarse en casa y no ir nunca a misa, pero si uno va a misa es porque ha entendido que el número uno de su vida es Jesucristo, su mejor y su único amigo verdadero.
Y por último, es el día del servicio. El Papa ha dicho que la vida es servicio: quien no vive para servir; no sirve para vivir, y esto es una realidad. Nosotros somos imitadores de Jesús. El día Jueves Santo le lavó los pies a sus discípulos, se hizo el último, se hizo el servidor.
Ahí están las ideas principales de este Jueves Santo. Jueves Santo no es importante por las visitas a las iglesias, no. Si uno no tiene como amigo personal a Jesús, las visitas a las iglesias es un turismo religioso bonito, pero de poca importancia. Uno va a visitar no a las iglesias, sino va a visitar al Santísimo Sacramento que es expuesto allí. Y pueden ser diez, catorce, siete, o una, lo importante es que yo vaya a visitar al más grande de nuestros amigos, al más grande de mis amigos.
En los actos litúrgicos de este día se realiza el lavatorio de los pies. Levantarse de la mesa, echar agua en la jofaina, quitarse el manto, ceñirse la toalla y lavar los pies… Uno tiene que estar muy seguro de sí mismo para hacer estas cosas. Hacer en el momento decisivo lo que se ha estado preparado toda la vida. Las situaciones extremas sacan lo mejor (o lo peor) de las personas. Al final de su vida, habiendo amado, amó hasta el extremo.
Y aunque el gesto es muy significativo, creo necesario explicarlo a fin de comprender la profundidad de este gesto . Hay veces que una imagen no vale más que mil palabras.
Ejemplo os he dado. Lo que he hecho, eso haced. Levantaos de la mesa, ceñíos la toalla, lavad los pies. Y esto en memoria mía, esto como eucaristía.
La Eucaristía es acción de gracias porque reconocemos en ella que todo lo hemos recibido de regalo. Desde la vida hasta los hermanos. En la Eucaristía se transparenta ya la celebración de la resurrección porque sin ella no tendría sentido y no sería más que un rito vacío. La Eucaristía abre nuestra humanidad al mundo, abre nuestra carne a la de nuestros hermanos y hermanas y nos hace conscientes de que no somos más que una carne, una familia, y que Dios es nuestro Padre. Y, en medio, presidiendo nuestra celebración, nuestro hermano mayor, Jesús que nos repite una y otra vez: “Haced esto en memoria mía.”
Con demasiada frecuencia se nos olvida que no podemos llegar hasta el altar sin habernos puesto a los pies de los dolientes, de quienes solo tienen para ofrecer sus pies sucios. Eucaristía: acción de la gracia.
Partir el pan, lavar los pies. Las dos caras (eucaristías) de una misma moneda.
Bibliografía:
- https://editorialsalesiana.com/reflexiones-de-semana-santa-jueves-santo/
- https://blogs.ucv.es/pastoral/reflexion-del-jueves-santo-1-abril-2021/
- https://es.catholic.net/op/articulos/18295/la-semana-santa-da-a-da.html#modal
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Febrero 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.