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La liturgia nos hace un llamado a realizar penitencia interior para encontrarnos con el Señor y abrir nuestro corazón a fin de que El haga su Obra cada uno y nos ayude a transformar nuestra vida y perdonar como El nos perdona.

Las lecturas de hoy, nos hacen un claro llamamiento a ir hacia dentro, a profundizar, a dejar de lado imágenes e ídolos y girar nuestras vidas hacia el que dice de sí mismo: «soy el Señor, tu Dios». 

La liturgia nos recuerda que la Cuaresma sirve para «cambiar nuestra vida, para ajustar la vida, para acercarnos al Señor». Mientras que la hipocresía es «el signo de que estamos lejos del Señor». El hipócrita «se salva por sí mismo, al menos así piensa.

Las lecturas de este día son una gran ayuda para purificar ideas, vivencias, sentimientos que podrían no coincidir con el auténtico rostro de Dios manifestado en Cristo Jesús.

La liturgia de hoy nos habla de la conciencia, es por eso que los estamos invitando a como Jesùs, en esta cuaresma hacernos un desierto y experimentar el fruto de esta actividad para vivir una Cuaresma al lado de Jesús

Hoy iniciamos la Cuaresma y la liturgia nos presenta el camino que nos llevara a la Pascua.