Señor mío, Tú que me quieres feliz y contento, me has dejado un programa de vida para encontrar el camino de la felicidad: Las Bienaventuranzas.
Tú, siendo Todopoderoso, te hiciste manso y humilde para dar consuelo a los afligidos, derramar tu misericordia, y trazarnos la ruta de la salvación.
Quiero abrir mi corazón de par en par y permitir que habites en él para que me guíes y me hagas entender que debo vivir un espíritu fraterno de caridad.
Ayúdame a entender la profundidad de tus palabras, que debo ir contra una sociedad que define la felicidad como una meta llena de materialismo.
Aparta de mí la vanidad y el deseo de tener muchos logros, dinero, bienes u ocupar grandes puestos, sin pensar que eso puede esclavizar mi alma.
Dios de mi vida, todo el que quiera llamarse cristiano y quiera ser uno de tus bienaventurados, debe experimentar el camino que Tú nos enseñaste
Quiero sentir tu mano poderosa que me acompaña, tu gracia que me impulsa y tu amor infinito que me transforma, me consuela y alivia las penas.
Dame la dicha, de tener una brújula en mi corazón que apunte siempre a la alegría que proviene de ese programa de vida que me has dejado. Amén
Propósito para hoy.
Fomenta la paz a tu alrededor. Controla los enfados, malos modales, groserías, insultos, esas cosas no agradan a Dios
Frase de reflexión.
“Espíritu Santo, sopla en nuestros corazones y haz que respiremos la ternura del Padre. Sopla sobre la Iglesia para que predique con alegría el Evangelio. Sopla sobre el mundo la brisa que restaura la esperanza”. Papa Francisco.
Pildoras de fe.net
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Junio 2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.