Sexto día de la Octava de Navidad.
https://youtu.be/EFEZCnWMB-w
- 1 Jn 2, 12-17
- Sal 95
- Lc 2, 36-40
A un día de finalizar el 2021 e iniciar el 2022, algunos nos centramos en realizar un análisis espiritual, pero otros nos dejamos arrasar por la actividad del mundo y los compromisos que ello conlleva.
La primera lectura de hoy nos hace un fuerte llamado a la reflexión en ese sentido, “el mundo pasa, y sus pasiones desordenadas también. Pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.”
En un sitio de laicos comprometidos dirigido por el Pbro. Ernesto María Caro, me he encontrado este comentario para la liturgia de hoy que quiero compartirles porque creo que nos ayuda a todos, para la preparación de este fin y principio de año, de una manera más espiritual, dice: en un mundo que se presenta lleno de atractivos de toda clase, es fácil caer en la tentación de amarlo y de elegirlo por sobre el valor único y definitivo que es Dios. Es por ello que el Apóstol nos previene: “No amen al mundo ni lo que hay en él”.
Esto no lo dice porque el mundo sea malo, pues como nos lo dice el Génesis, Dios “hizo todo muy bien”, y por ello todo es bueno. El problema se presenta cuando deslumbrados por el “oropel” del mundo dejamos a Dios, o lo relegamos dentro de nuestra vida haciendo que sus mandamientos y preceptos pierdan validez e importancia en nuestra vida.
San Pablo decía: “Todo me está permitido pero no todo me conviene” 1 Cor 10, 23. Dale el primer lugar a Dios en tu vida y ten el Evangelio al centro de todas tus actividades; esto hará que sea el Espíritu quien dirija tu vida, quien te llevará a disfrutar de todo lo que Dios ha creado para nuestro bienestar y nuestra felicidad, pues como nos dice el Apóstol San Juan en el texto de hoy, los pecados nos han sido perdonados en el nombre de Jesús.
El sentido general de estos versículos, afirma Fray Salustiano Mateos Gómara O.P., es afianzar a “mayores, a jóvenes y a niños” a mantenerse firmes en la fe. Ahí el apóstol Juan no está hablando de edades biológicas. Alude más bien a los distintos estadios por donde discurre la vida de la fe. Por eso habla de esa comunidad donde hay personas maduras en la fe, personas que están en desarrollo y esas personas que están comenzando su camino cristiano a los que llama niños. A todos ellos van sus palabras aclarando términos y animando a vivir en fidelidad a esa Palabra recibida para seguir creciendo en todos los aspectos de la fe cristiana.
Por eso con el Salmista, alabemos al Señor y reconozcamos su gloria y su poder y tributémosle honores a su nombre.
El Papa Francisco nos dice en el comentario del evangelio de hoy que “Ana, a pesar de su avanzada edad, cobró nuevas fuerzas y se puso a hablar a todos del Niño. Es una hermosa estampa: dos jóvenes padres y dos personas ancianas, reunidas por Jesús. ¡Realmente Jesús hace que generaciones diferentes se encuentren y se unan! Él es la fuente inagotable de ese amor que vence todo egoísmo, toda soledad, toda tristeza.
En su camino familiar, ustedes comparten tantos momentos inolvidables: las comidas, el descanso, las tareas de la casa, la diversión, la oración, las excursiones y peregrinaciones, la solidaridad con los necesitados… Sin embargo, si falta el amor, falta la alegría, y el amor auténtico nos lo da Jesús: Él nos ofrece su Palabra, que ilumina nuestro camino.”
Qué hermoso, y esto solo lo posibilita la Navidad del Niño Dios recién nacido, nos comenta Monseñor Luis Alberto Fernandez Obispo de la Diócesis de Rafaela, Ana la mujer del Evangelio representa no algo acabado, derrumbado, sino, en el esplendor de la vida, dando gracias a Dios, no hablando del pasado añorado, sino del futuro, no encerrada en sus temores sino abierta a la vida naciente, con sentido solidario, de comunión, como tantas abuelas y abuelos llenos de alegría por la vida de sus hijos jugando y conteniendo a sus nietos, mirando el futuro y animando a los jóvenes a seguir construyendo un mundo mejor que el que ellos pudieron darles.
Y allí están, el niño Jesús junto a María y a José que vuelven a lo cotidiano de Nazaret, no a vivir de éxitos o de cosas deslumbrantes, no. No les había nacido un mago, un adivino, les nació el Hijo de Dios que vivirá 30 años en lo escondido, en el estudio, en el trabajo, ayudando a su padre carpintero, anunciando al mundo la llegada del reino, un reino de justicia, de paz, de humildad y sencillez, de servicio y de amor; es el verdadero reino, el reino de Dios, la navidad que Dios quiera, amigos, la podamos vivir a lo largo de todo este año que vamos a comenzar. ¡¡¡FELIZ, FELIZ NAVIDAD!!! ¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO QUE SE ACERCA!!!
Palabra de Vida Mes de Diciembre 2021
«¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Se-ñor!» (Lc 1, 45) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Diciembre 2021.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.