A mí me cuesta mucho guardar silencio a este respecto, pues al ser víctima desde muy joven, igual que Isabel Gamboa Barboza, a mí me vienen las imagines de esos hombres que te tocan, que te hacen comentarios vulgares, miradas lascivas, que te acosan en tu trabajo, papás de amigas que como decimos en Costa Rica, “te sueltan los perros”, y durante años de años hemos guardado silencio porque primero no tuvimos la formación para tener la certeza de que eso es no está bien, nos deformaron desde la educación, pues nuestros primeros conocimientos se dieron con el texto de Paco y Lola que, nos aleccionó , a que “el hombre todo lo que hace es esperar a que la mujer” amase la masa.” Entonces nos han manipulado durante años con la filosofía de que la mujer está para “servir”, muchas hemos encontrado en la Iglesia con grandes paradigmas que nos sometieron a la voluntad del hombre, como hombre y no como “imagen de Dios”. Y para colmo de males oímos comentarios de la gente, hombres y mujeres, que dicen comentarios como “seguro se lo buscó “, por la manera que vestimos, hablamos, y/o nos comportamos; sin embargo ellos que son los que se comportan mal, quedan libres de toda responsabilidad al respecto, por ende hemos callado y aguantado durante décadas, hundidas en esta ola de violencia y acoso que solo ha socavado nuestra autoestima.
Entonces señores y señoras, cómo denunciar a ese pariente, ese amigo de la casa, ese maestro, ese jefe, ese compañero de trabajo que nos acosa, que nos violó, sepan que si no lo hicimos antes, no fue por ninguna de esas cosas, sino porque para llegar a denunciar esto hemos necesitado un arduo camino de confrontación y un procesos dolorosos que solo nosotros que lo hemos vivido, sabemos lo que significa
A todo esto sumemos que cada mujer que ha salido a hacerlo público, se ha visto expuesta a todo tipo de comentarios y mofas en las que no se toma en serio el esfuerzo y la valentía que muestra; algunas están hoy en los medios sociales, pero una gran parte de ellas lo han hecho en el seno del hogar, o en su trabajo, nadie sabe su nombre.
Yo quisiera que usted querida compañera sepa que es mi heroína.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Febrero 2019
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo me sale bien”
Sor Evelia 08/01/2013.
Bibliografía: