Hoy al acercarse el final del año litúrgico, las lecturas nos muestra el camino de entrega que debemos transitar y aceptar con confianza

Hoy iniciamos Las Témporas, un acercamiento mutuo de la liturgia y la vida humana, en el afán de encontrar en Dios la fuente de todo don y la santificación de la tarea de los hombres.

Hoy la liturgia nos insta a reflexionar en vivir discerniendo en los valores definitivos que deben privar en nuestra vida para obtener la salvación, contemplando la huella de Dios. 

Tres ejes centrales nos da la liturgia de hoy: la Palabra de Dios es eterna y estable, por ella llegamos a la Sabiduría y esta nos muestra el camino para vivir el Reino de Dios en nosotros.

Hoy la liturgia nos explica la importancia de dar Gloria a Dios y como lo podemos lograr actuando con Sabiduría: poniendo atención a sus Palabras y buscándolas con interés.

Hoy la liturgia nos invita a crecer en la fe, ¿cómo?,  confiando en el Señor en los momentos de dificultades y permaneciendo unidos al Señor, por eso nos enseña un estilo de vida nuevo.

Dios en la liturgia de cada día va comunicando su deseo de salvación para cada  uno de nosotros, hoy nos muestra la sabiduría que necesitamos
, para con fe y practicar el perdón.