El reino de Dios se hace presente en la persona misma de Jesús. Él es el tesoro escondido, es Él la perla de gran valor. Se comprende la alegría del campesino y del comerciante: ¡lo han encontrado y el resplandor en el rostro de Moisés.
Es bueno para nosotros que cada día nos hagamos esta pregunta: “¿Hoy sembré paz o sembré cizaña?”. Pero, a veces, hay que decir las cosas, porque aquél y aquella… Con esta actitud, ¿qué siembras tú?
Pregúntate hoy, delante de santa Marta: ¿Cómo es mi amor por los demás? ¿Me lleva a conocer a Dios? Y también: Mi amistad con Jesús, vivida en el diálogo con él, ¿me hace descubrir su verdadera identidad y, en ella, la certeza de una vida feliz?
Jesús es consciente que su propuesta va en contra de las tendencias del mundo, pero el suyo es un camino necesario para todo aquel que quiera ser santo.
Hoy, todos los días, pero hoy de manera especial, Jesús siembra. Cuando aceptamos la Palabra de Dios, entonces somos el Campo de la Fe. Por favor, dejen que Cristo y su Palabra entren en su vida, dejen entrar la simiente de la palabra de Dios, dejen que germine, dejen que crezca
María Magdalena,primera destinataria de la noticia más importante de la historia de la salvación, imagen universal de la búsqueda de todos los hombres del amor único, capaz de llenarnos, de completarnos, el Amor de Dios .