https://youtu.be/QHIRGgcmmmk
- Gen 9, 1-13
- Sal 101
- Mc 3, 27-33
Hoy el Señor nos habla en la primera lectura de la Alianza que hizo con Noé.
La alianza es una idea teológica central en el AT, que usa ese término para expresar la relación especial que Dios tiene con Israel. Es fundamental para la fe, la vida y el culto de Israel la convicción de que Dios, en un tiempo y lugar particular y libremente, ha querido entrar en comunión con Israel y constituirlo como pueblo de Dios, imponiéndole obligaciones específicas. El símbolo dominante utilizado por Israel para describir esa relación especial es el de alianza. Es una imagen que le viene de su ambiente cultural y social.
El establecimiento de esta alianza con Noé después del diluvio sirve para confirmar el proyecto creacional original de Dios que había sido destruido por el diluvio. Dios promete así solemnemente que el mandato humano de la creación (Gn 1,26-30) nunca será interrumpido por una suspensión del orden natural (Gn 8,21-22; 9,11-15). Significativamente esta alianza es descrita como «eterna» (9,16), un término que por el contexto parece significar al menos «mientras dure la tierra» (8,22). Esta dimensión universal de la alianza tiene un interés especial: no dejar al conjunto de la humanidad ni a la totalidad del tiempo, y no sólo a Israel, fuera del cuidado de la gracia y la misericordia de Dios. Algo que ya estaba insinuado en la alianza con Abrahán.
Como signo de esta Alianza, se hace viable con el arco iris. En la concepción del AT este arco estaría deteniendo las aguas de arriba para evitar que vuelvan a destruir la tierra y por otro lado es el signo del “arco” que en general sirve para la guerra que ahora habla de la paz y la alegría que Dios ofrece a su pueblo.
De esta manera el hombre podría recordar en cada lluvia, al salir el sol, que el pecado es la causa de la destrucción, y mantenerse siempre alerta y lejos de éste para evitar que la muerte vuelva a terminar con la creación. Le recordará que la sangre derramada, como la de Abel, siempre clama al cielo, y que la muerte sólo engendra muerte.
Es triste que, a pesar de todas las señales que Dios nos ha dado, de todas las alianzas que ha hecho con nosotros “hasta la realizada con la Sangre de su Hijo” continúen siendo ignoradas y que nuestro afán de poder y la soberbia continúen haciendo presa al hombre que no cesa de destruirse a sí mismo, tomando la sangre de sus propios hermanos.
El mundo hoy no piensa como Dios. Lo débil, lo pequeño, ya no cuenta, es prescindible y eliminable. No te dejes contagiar por la mentalidad del mundo, piensa en grande, piensa como Dios, nos pasa como Pedro en el texto del evangelio de hoy que después de proclamarlo como el Mesías, no acepta los designios de Dios.
Afirma el Papa Francisco: “La Biblia y la historia de la Iglesia nos enseñan que muchas veces, incluso los elegidos, andando en el camino, empiezan a pensar, a creerse y a comportarse como dueños de la salvación y no como beneficiarios, como controladores de los misterios de Dios y no como humildes distribuidores, como aduaneros de Dios y no como servidores del rebaño que se les ha confiado. Muchas veces, por un celo excesivo y mal orientado, en lugar de seguir a Dios nos ponemos delante de él, como Pedro, que criticó al Maestro y mereció el reproche más severo que Cristo nunca dirigió a una persona: “¡Ponte detrás de mí, Satanás! ¡Tú piensas como los hombres, no como Dios!”
Ellos no habían comprendido del todo la misión de Jesús, pues tenían una idea equivocada de lo que era el Mesías; será necesario que guarden silencio hasta que no lo comprendan del todo. Es necesario que le sigan, que sigan aprendiendo. Es necesario que se liberen de falsas concepciones del Mesías y de la idea que tenían de su misión. Su misión es muy comprometida con su Dios como su Padre y con la humanidad. Tienen que seguir aprendiendo de su actuación y los acontecimientos que le van a ocurrir por ser el Mesías.
¿No tendremos que seguir descubriendo qué repercusiones tiene para nuestra vida, las afirmaciones que hacemos sobre Jesús?Aquí está la provocación, seguir descubriendo las exigencias de ser seguidores de Jesús y qué retos nos exige, para proponer a los demás el ser seguidor de Jesús.
Seamos nosotros la generación que renueve la alianza con el Señor y busquemos con todas nuestras fuerzas que esta cadena de destrucción, de la que muchas veces nosotros mismos somos un eslabón, termine y volvamos a respetar la Alianza de amor de Dios con nosotros.
Experimentemos desde nuestra oración la presencia liberadora del amor de Dios presente en nuestra vida. Él continúa haciendo alianza con nosotros con signos claros de su presencia, como aquel arco puesto en las nubes prometido a Noé.
Bibliografía:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2023/02/16/pensar-como-dios/
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://es.catholic.net/op/articulos/72392/cat/1036/y-empezo-a-instruirlos.html#modal
- https://web.unican.es/campuscultural/Documents/Aula%20de%20estudios%20sobre%20religi%C3%B3n/2011-2012/CursoTeologiaElPadreEstableceLaAlianzaDefinitiva2011-2012.pdf
- http://webcatolicodejavier.org/evangeliodeldia.html
Palabra de Vida Mes de Febrero 2023
Tú eres el Dios que me ve” (cf. Génesis 16, 13) https://ciudadnueva.com.ar/wp-content/uploads/2022/12/PV-02-2023_doble.doc
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Febrero 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.