?⛅️ Buenos días. “Señor enséñame a amar como tú nos has amado“. Papa Francisco.
- 2 Cor 9, 6-10
- Sal 111
- Jn 12-24, 26
En la fiesta de San Lorenzo, diácono y mártir. Ejerció su función en una época de gran persecución a la Iglesia; ante el peligro decide regalar todo a los mas necesitados. El alcalde de Romo, pagano y apegado a la riqueza le ordena que le traiga los tesoros de la Iglesia.
Lorenzo le pidió que le diera tres días de plazo para reunirlos y en esos días fue invitando a todos los pobres, lisiados, mendigos, huérfanos, viudas, ancianos, mutilados, ciegos y leprosos que él ayudaba con sus limosnas. Y al tercer día los hizo formar en filas, y mandó llamar al alcalde diciéndole: “Ya tengo reunidos todos los tesoros de la iglesia. Le aseguro que son más valiosos que los que posee el emperador“; Esa acción lo costó la vida. .
En la fiesta de San Lorenzo, diácono y mártir, la Iglesia nos invita a reflexionar sobre nuestra capacidad de dar y de darnos; para ello nos ofrece unos textos de la Palabra divina que nos hablan de la importancia de LA SEMILLA. Vamos a reflexionar sobre ella desde la energía y potencia que, depositada por Dios, posee en sí misma para crecer y desarrollarse. ¡Y tan pequeñas y frágiles que parecen en nuestra mano!
En la segunda Carta de Pablo a los Corintios, el Apóstol los invita a colaborar en la colecta que se realiza entre las distintas comunidades para ayudar a los cristianos de Jerusalén. A colaborar sin egoísmos ni mezquindad alguna, sino a ¡sembrar con abundancia esa ayuda!
Al prestar un servicio, como en este caso, debemos hacerlo con ganas, con generosidad, como lo hizo Jesús, el Señor. Más que “dar” una cosa, “darnos” junto con ella. “Darnos” con alegría, con entusiasmo, porque nos damos unidos a Dios. Jesús no se midió, no calculó su entrega, se “dio por entero”, con todas las consecuencias.
Nuestra ayuda, nuestro servicio entregado, desplegará por sí solo la enorme energía que pone Dios en él, porque Dios actúa en el Amor.
En la lectura del Evangelio de hoy, nos explica el Papa Francisco, :vemos que Jesús usa una imagen sencilla y sugestiva, aquella del “grano de trigo” que caído en la tierra, muere para dar fruto.
En esta imagen encontramos otro aspecto de la Cruz de Cristo: el de la fecundidad. La cruz de Cristo es fecunda. La muerte de Jesús, de hecho, es una fuente inagotable de vida nueva, porque lleva en sí la fuerza regeneradora del amor de Dios.
Inmersos en este amor por el Bautismo, los cristianos pueden convertirse en “granos de trigo” y dar mucho fruto, si al igual que Jesús, pierden la propia vida por amor a Dios y a los hermanos…“
Seguir a Jesús, nos dice el padre Yepes en el audio, vivir en su exigencia, es contradictorio con lo que el mundo nos ofrece de vivir según nuestros propios deseos y por eso nos resistimos tanto.
El grano de trigo, nos dice el padre Juan José Paniagua, es nuestra vida cada vez que muere a su egocentrismo, a su egoísmo para servir a los demás, es decir para dar fruto.
El grano de trigo que muere, resalta que ha llegado la hora de Jesús, de su Pasión. Como el grano de trigo que cuando muere produce mucho fruto; Jesus nos invita a seguirle en esta entrega total a ser fruto de su muerte; a amar de verdad, a servir como El.
Hablando de quienes nos hemos enfriado en esta misión con el Señor, nos propone el Papa, …”quizás ha perdido la fe; a tantos que aún no han encontrado a Jesús personalmente, a todas estas personas podemos ofrecerles tres cosas: el Evangelio; el Crucifijo y el testimonio de nuestra fe, pobre pero sincera.
- El Evangelio: ahí podemos encontrar a Jesús, escucharlo, conocerlo.
- El Crucifijo: signo del amor de Jesús que se entregó por nosotros.
- La fe que se traduce en gestos simples de caridad fraterna.
<
p data-removefontsize=”true” data-originalcomputedfontsize=”16″>Pero principalmente en la coherencia de vida: entre lo que decimos y lo que vivimos, coherencia entre nuestra fe y nuestra vida, entre nuestras palabras y nuestras acciones. Evangelio, Crucifijo y testimonio. Que la Virgen nos ayude a llevar estas tres cosas.”
Palabra de Vida Mes de agosto
¿Quién podrá entonces separarnos del amor de Cristo? (Romanos 8,35
Bendigamos al Señor con nuestro testimonio este día y digámosle:
"Me siento fuerte, sano y feliz porque tengo fe, amor y esperanza".
? ?
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Agosto 2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.