https://youtu.be/lrkO6H6wpGI
- Apoc 7, 2-4. 9-14
- Sal 23
- 1 Jn 3, 1-3
- Mt 5, 1-12
Nos explica el Papa Francisco que “esta solemne Fiesta de Todos los Santos, la Iglesia nos invita a reflexionar sobre la gran esperanza, la gran esperanza que se basa en la resurrección de Cristo: Cristo ha resucitado y nosotros también estaremos con Él, estaremos con Él esta es la esperanza cristiana, porque la vivieron plenamente en su vida, entre alegrías y sufrimientos, poniendo en práctica las Bienaventuranzas que Jesús predicó y que resuenan en el Evangelio. Las Bienaventuranzas evangélicas, en efecto, son el camino de la santidad, porque la vivieron plenamente en su vida, entre alegrías y sufrimientos, poniendo en práctica las Bienaventuranzas que Jesús predicó y que resuenan en el Evangelio. Las Bienaventuranzas evangélicas, en efecto, son el camino de la santidad y la Palabra de Vída de este mes nos invita a vivir una de las bienaventuranzas “Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia.” Chiara Lubich, nos explica que este sermón, está dedicado a sus discípulos, a la comunidad naciente, a los que luego serán llamados cristianos. Introduce así el “reino de los cielos”, que es el núcleo central de la predicación de Jesús de la que las bienaventuranzas representan el manifiesto programático, el mensaje de la salvación, la “síntesis de toda la Buena Nueva que es la revelación del amor salvífico de Dios.
Una de las cosas que hemos olvidado los cristianos, es que estamos llamados a la santidad. Pensamos hoy en día que los santos son personas extrañas venidas quizás de otros planetas, que están destinadas a hacer cosas que sólo ellos pueden hacer pues el común de los mortales no lo lograremos. Pero el libro del Apocalipsis, que leemos en esta fiesta de Todos los Santos, nos habla de esta multitud de personas que están delante del Cordero, ellos son los santos. Estos santos somos nosotros, pues todos estamos destinados a vivir eternamente con Dios delante de su trono y alabarlo por toda la eternidad.
Esa multitud somos todos aquellos que hemos lavado nuestras ropas en el bautismo y que hemos recibido la vestidura blanca de la gracia; pero al mismo tiempo, somos los que hemos pasado la gran persecución. Esta persecución de la que se habla es la que hoy el mundo no quiere vivir, no queremos ser perseguidos por nuestra manera de pensar y de ser, queremos, como ha sido siempre la gran tentación del pueblo santo de Dios, SER COMO LOS DEMÁS PUEBLOS.
Debemos recordar hoy, que nosotros hemos sido rescatados a precio de sangre y que no podemos ser como los demás, somos hijos de Dios y en nosotros habita el Espíritu Santo. Estas diferencias, quien las entiende y las vive será perseguido y éste será el mejor signo de nuestra pertenencia a Cristo, será la señal inconfundible que tendremos de que un día estaremos con Jesús en el cielo alabándolo por toda la eternidad. Al festejar a los santos sigamos su ejemplo y formemos parte de esta vida de santida
El salmo esta estructurado para acompañar el momento en que una gran procesión sube a las puertas del Templo de Jerusalén y nos cuestiona sobre las condiciones para entrar en El, sin embargo el mismo texto nos responde que la condición es, confiar únicamente en El y dándole prioridad en nuestro caminar.
San Juan en la segunda lectura, ahonda en el tema de la comunión: «seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es». Una comunión que se da ya, pero que es a la vez una llamada a realizar. Existe también una relación entre el «conocer» y la comunión. Porque no se trata sólo de un conocimiento intelectual o superficial. Sino que es más profundo y nos sitúa ante la comunión con Dios. Aquellos que no buscan la comunión con Dios no podrán «conocer» o incluso comprender muchas de nuestras decisiones o actitudes. Además, se suma que nosotros tenemos que ir purificándonos para llegar a una comunión más plena. Un proceso que hace Dios mismo cuando somos fieles
Y el evangelio nos insta a “Estar alegres y contentos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo”. Es el Señor quien así nos anima en un día especialmente significativo para recordar estas palabras: el día de todos los Santos.
La Iglesia pone delante de nuestros ojos un pasaje conocido por todos como “el sermón de la montaña”, o más adecuadamente, “el sermón de las bienaventuranzas” y la Palabra de Vida nos indica como vivir una de ellas y nos explica que este sermón, está dedicado a sus discípulos, a la comunidad naciente, a los que luego serán llamados cristianos. Introduce así el “reino de los cielos”, que es el núcleo central de la predicación de Jesús, de la que las bienaventuranzas representan el manifiesto programático, el mensaje de la salvación, la “síntesis de toda la Buena Nueva que es la revelación del amor salvífico de Dios” “Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia.”
Ciertamente la dicha mayor, la mejor buenaventura que nos puede pasar es conseguir la vida eterna y estar con Dios todos los días, después de nuestro paso por la tierra. Habremos conseguido el fin para el que nacimos. ¡Qué poco nos paramos a pensar en la finalidad de nuestra vida!, lo que da sentido a nuestra existencia, el para qué estoy en la tierra.
Los hombres de fe tienen una suerte enorme sobre los incrédulos o los ateos (y esto no quiere ser, ni de lejos, ofensivo). No podemos dejar de dar gracias a Dios por tener fe (don gratuito de Dios), que nos hace vivir, dentro de las penalidades propias de esta vida (enfermedades, contradicciones, muertes de seres queridos, traiciones o injusticias), con la alegría, la dicha, de saber cuál es el final que aguarda a los que se esfuerzan por vivir las bienaventuranzas que predica el Maestro.
Con la Oración de los Fieles pidamos que nos conduzca a la santidad.
Bibliografía
- Folleto La Misa de Cada Día
- PildorasdeFe.com
- https://ciudadnueva.com.ar/noviembre-2022/
- https://www.evangelizacion.org.mx/liturgia/
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/pautas/
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2022/11/01/el-ejemplo-de-los-santos/
Palabra de Vida Mes de Noviembre 2022
“Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia.” (Mateo 5, 7) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Noviembre 2022.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.