Hoy la liturgia nos invita a reflexionar sobre las palabras del Padre acerca de su Hijo amado y San Juan en la primera lectura, nos hace énfasis en la importancia de creer en Jesús.
Navidad es un tiempo privilegiado para testificar, para señalar al Recién Nacido; por ello, la liturgia nos presenta los textos que nos invitan a que nosotros, de la misma forma que Juan el Bautista, también lo hagamos conocer por los demás.
La liturgia de hoy nos invita a permanecer en Cristo y a ser proclamadores de la Buena Nueva, no solo de palabra sino con nuestro testimonio, como lo hizo Juan el Bautista.
Hoy la Iglesia contempla agradecida la maternidad de la Madre de Dios, modelo de su propia maternidad para con todos nosotros. También celebramos La Jornada Mundial de la Paz.
