Amado Señor, ayúdame a llevar una vida con fe, paciencia y según tu voluntad para que pueda ser testimonio de tu bondad por medio de buenas acciones.
Dar a conocerte, no sólo es una responsabilidad de la Iglesia, también es la mía, a mí me has llamado a dar frutos y dejar tu semilla en suelo fértil.
Quiero entregarme a tu amor, por eso, pasa tu mano sanadora sobre mí y transforma toda emoción dolorosa que me está robando la paz.
Necesito de Ti, que infundas en mi corazón la valentía de llevar tu mensaje a todos los rincones del mundo, proclamando tu verdad y tu justicia.
Sé que no cuento con la fuerza suficiente para cambiar los corazones heridos, pero unido a Ti, todo terreno pedregoso puede ser allanado.
Haz que también yo sea un terreno fértil donde germine el amor y la compasión. Que otros puedan ver en mí los frutos de conocerte.
Señor, que a través de mi testimonio de mi vida, brille la dulzura de tu rostro y pueda conducir a otros a que formen parte de la eterna alegría de tu Reino.
Abro mi corazón en este instante para recibir tus bendiciones y toda tu fuerza, para así poder contar con todas las maravillas de tus promesas. Amén
Propósito para hoy
Evitaré cualquier tipo de enojo durante el día aunque hayan algunas situaciones de injusticias, ofreciéndolo por la conversión de los míos.
Frase de reflexión
“No hay mejor medicina para curar tantas heridas que un corazón que sepa de misericordia”. Papa Francisco.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Enero 2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.