Señor, quiero tomar conciencia de que tu amor es la única fuerza que llena de plenitud la vida y sólo tu amor tiene el poder de transformar corazones.
Gracias por abrirme las puertas del Cielo con tu resurrección, por abrirme a la esperanza y por darme la fe para enfrentar mis batallas y resistir al mal.
Con tu gracia, me has capacitado el espíritu para librarme de aquellos que conmigo no tienen las mejores intenciones y quieren verme tropezar.
Sopla sobre mí esa fortaleza de tu Espíritu Santo para vencer toda dificultad, porque con esa poderosa Presencia me puedo mantener firme en la prueba.
Quiero sentir la fuerza sanadora de tu Cruz confiado en que has entregado tu vida en ella para sanarme y convertirme en valiente colaborador de tu Reino.
Ilumina mi vida para entender que, con tu resurrección, puedo vencer todo miedos y angustia del camino, porque Contigo voy, Contigo soy y Contigo vivo.
Mis esfuerzos, mis rutinas, mis logros y fracasos, todo cobra sentido en tu sacrificio de Cruz… Eres el Señor y siempre estarás cuando más te necesito.
Como Pedro, al conocer tu presencia, quiero lanzarme al agua de vida e ir hacia Ti donde me esperas para saciar mi corazón de tu amor. Amén
Propósito para hoy.
Hoy, rezaré por las benditas almas del Purgatorio, para que pronto encuentren el consuelo celestial.
Frase de reflexión.
“Queridos jóvenes, les invito a poner sus talentos al servicio del Evangelio, con creatividad y con una caridad sin fronteras”. Papa Francisco.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Abril 2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.