- 1 Cor 4, 6-15
- Sal 144
- Lc 6, 1-5
El ser humano es sumamente complejo en lo referente a conducta, emociones, sentimientos, orgullos y conocimientos, entre otros aspectos relacionados con el psique. Y todo esto pasa por un filtro, del que nos habla las lecturas de hoy; se llama conciencia y que además es quien nos cuestiona si estamos bien o mal en nuestras acciones. La conciencia, también la podemos llamar como “el santuario inviolable dónde solamente entran Dios y la misma persona”. Nadie más entra en nuestra conciencia.
En ocasiones por nuestras responsabilidades, por nuestra posición social o por nuestro poder nos sentimos superiores a las demás personas. Y esto es lo que San Pablo nos exhorta, a conducirnos con humildad
Hoy se dirige a los cristianos de la Iglesia de Corinto, que se consideraban muy importantes y como si su vivir como cristianos se debiera a ellos mismos y sus fuerzas. “Ya tenéis todo lo que ansiabais, ya sois ricos, habéis conseguido un reino sin nosotros”. Para empezar les recuerda que todo lo han recibido. “¿Tienes algo que no hayas recibido?”.
Luego sigue empleando una fina ironía. Emplea este lenguaje no para avergonzarlos sino para que vean lo mucho que les quiere, porque “soy yo quien os ha engendrado para Cristo Jesús”.
También en el texto del evangelio, nos hace un llamado a examinarnos al insistir acerca de las prohibiciones del sábado, ello para que aprendamos una lección muy importante: que malinterpretamos la ley del sábado y que el Hijo del hombre es Señor del sábado. Está pues en juego el corazón de la Ley y la verdad sobre la persona de Jesús, que al ponerse por encima del “sábado” se sitúa a la altura del Creador y anuncia el nuevo día de sábado con su resurrección tras su pasión y muerte.
Nos urge a los cristianos recuperar ese pleno sentido del “sábado” que nos trae Cristo. San Juan Pablo II, nos quiso hacer tomar consciencia de esto con su Exhortación “El día del Señor”. En ella nos advierte del riesgo de haber consolidado ampliamente la práctica del “fin de semana”, como un tiempo de especial dedicación a descansar, divertirse… Por desgracia, cuando el domingo pierde el significado originario y se reduce a un puro “fin de semana”, puede suceder que el hombre quede encerrado en un horizonte tan restringido que no le permite ya ver el “cielo”. Es importante no confundir la celebración del domingo, que debe ser una verdadera santificación del día del Señor, con el “fin de semana”.
Ante este panorama, parece necesario más que nunca recuperar las motivaciones doctrinales profundasque son la base del precepto eclesial, para que todos los fieles vean muy claro el valor irrenunciable del domingo en la vida cristiana. Hemos de recuperar la “santificación del domingo, sobre todo con la participación en la Eucaristía y con un descanso lleno de alegría cristiana y de fraternidad.
”El Señor cuida de quienes lo aman” Sal 144.
Textos Consultados:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2024/09/07/el-nuevo-sabado/
- Ven Espíritu Santo, Facebook
Palabra de Vida Mes de Setiembre. “Pongan en práctica la Palabra y no se contenten sólo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos” (Santiago 1,22) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Setiembre 2024.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.