https://youtu.be/-GjbGjdaZtE
- 1 Re 17, 7-16
- Sal
- Mt 5, 13-16
La liturgia de hoy nos invita a repetir desde lo más profundo de nuestro ser dedicado al Corazón de Jesús la jaculatoria que desde niños nos han enseñado: “Sagrado Corazón de Jesús en vos confío”.
Y es que como lo acabamos de leer en la primera lectura el Señor muchas veces como al profeta Elías nos llama y nos pide que dejemos de estar escondidos que mostremos al mundo como se vive, según su Voluntad, la obediencia y cómo a ejemplo de la viuda de Sarepta confiar en su Providencia. Por eso el Salmista no indica que su bondad es admirable y que confiemos en El cuando lo invocamos. Y poder así ser Luz en el mundo y Sal en la tierra. La luz y la sal, en definitiva, son una metáfora de cómo el cristiano puede iluminar y potenciar toda la realidad y, especialmente, la vida de los demás. Son una imagen de nuestra verdadera vocación que, con la ayuda de Jesús, nos lleva a hacer una ofrenda de nuestra vida. Y, lo que podamos dar, en definitiva, lo hemos recibido antes. Con la Virgen María podemos decir: “Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios mi salvador”. Porque la fe aporta luz y alegría a la vida. Jesús nos exhorta hoy a saber manifestarlo a los demás.
Hemos visto como el libro de los Reyes nos presenta hoy un texto que nos puede inducir a la sorpresa de esa confianza tan grande en un personaje totalmente desconocido. Una confianza que hace posible que la orza de harina no se vacíe ni la alcuza de aceite se agote.
Y de forma indirecta la Palabra nos ofrece la pregunta implícita: ¿Y yo? ¿Soy capaz de creer en las palabras de un desconocido? ¿Cómo anda mi capacidad de arriesgar incluso mi propia vida y la de las personas más allegadas a mí por una promesa que pone como garante a Dios: “hasta el día en que el Señor envíe la lluvia sobre la tierra”?
Una vez más, la Palabra nos invita a reconocer el paso de Dios en nuestra vida, incluso en lo desconocido y en las promesas más absurdas… vivir en la fe y desde la fe nos permite vivir las mismas circunstancias con un sabor y una luz diferente. Ni mejor ni peor, sencillamente diferente.
“Vosotros sois la sal de la tierra… Vosotros sois la luz del mundo» (Mt 5, 13.14). “Esto nos maravilla un poco si pensamos en quienes tenía Jesús delante cuando decía estas palabras., afirma el Papa Francisco ¿Quiénes eran esos discípulos? Eran pescadores, gente sencilla… Pero Jesús los mira con los ojos de Dios, y su afirmación se comprende precisamente como consecuencia de las Bienaventuranzas. Él quiere decir: si sois pobres de espíritu, si sois mansos, si sois puros de corazón, si sois misericordiosos… seréis la sal de la tierra y la luz del mundo. El cristiano debería ser una persona luminosa, que lleva luz, que siempre da luz. Una luz que no es suya, sino que es el regalo de Dios, es el regalo de Jesús.
Ser sal. El cristiano ha de dar el gusto: mostrar con la alegría y el optimismo sereno de quien se sabe hijo de Dios, que todo en esta vida es camino de santidad; que dificultades, sufrimientos y dolores nos ayudan a purificarnos; y que al final nos espera la vida de la Gloria, la felicidad eterna.
Y, también como la sal, el discípulo de Cristo ha de preservar de la corrupción: donde se encuentran cristianos de fe viva, no puede haber injusticia, violencia, abusos hacia los débiles… Todo lo contrario, ha de resplandecer la virtud de la caridad con toda la fuerza: la preocupación por los otros, la solidaridad, la generosidad…
Y, así, el cristiano es luz del mundo (cf. Mt 5,14). El cristiano es esta antorcha que, con el ejemplo de su vida, lleva la luz de la verdad a todos los rincones del mundo, mostrando el camino de la salvación… Allá donde antes sólo había tinieblas, incertidumbres y dudas, nace la claridad, la certeza y la seguridad.
Con la Oración Colecta pidamos al Espíritu Santo que pos su inspiración, nos conceda comprender lo que es recto y que bajo su guía, lo hagamos realidad.
Bibliografía
- Folleto La Misa de Cada día.
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2022/06/07/luz-y-sal/
- https://www.vaticannews.va/es/evangelio-de-hoy.html
- http://webcatolicodejavier.org/evangeliodeldia.html
Palabra de Vida Mes de Junio 2022
«Tú eres mi Señor, mi bien, nada hay fuera de ti» (Sal 16, 2) https://www.focolare.org/espana/es/news/category/parola-di-vita/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Junio 2022.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.