- Deut 30, 15-20
- Sal 1
- Lc 9, 22-25
Nos vamos adentrando en la cuaresma, tiempo propicio para repensar nuestras opciones de vida y ver si se parecen a las de Jesús de Nazaret. Ellas serán las que marquen el rumbo y los acontecimientos en nuestro caminar. ¿Por qué temer? Yahvé y Jesús nos acompañan.
En la liturgia, el Señor, nos presenta dos opciones de vida: con El o sin El; con El tendremos bendición, sin El tendremos mal y muerte.
En la primera lectura, al igual que a los israelitas, Moisés, nos plantea una encrucijada: si seguimos la voluntad de Dios vamos a la vida, si nos alejamos de ella vamos a la muerte.
Sabias y esperanzadas palabras salen de sus labios diciendo: “Escucha pueblo mío, mira, hoy pongo delante de ti la vida y el bien, la muerte y el mal. Yo, temando hoy amar al Señor, tu Dios y seguir sus caminos…, y así vivirás.; Él, te bendecirá y poseerás la tierra donde vas a entrar. Abre tu corazón y escucha la voz de tu Dios”.
¿Qué Dios es tan cercano como nuestro Dios? Él, siempre da el primer paso, nosotros sólo tenemos que abrir nuestro ser, escuchar con el corazón y sentirse uno con la creación.
Su presencia amorosa y liberadora, no es algo que está fuera de nuestro alcance. No es solamente para los sabios y entendidos. Él, nos dice hoy a nosotros: Mi alianza está en tus entrañas, en tu mente y en tu corazón. Elige la vida.
Como dice el salmo: Dichosa la persona cuyo gozo es el amor del Señor, fuente de interioridad y compromiso. Es como un árbol plantado al borde de la acequia, da frutos y no se marchita.
NE sito seguridad, Señor, en medio de este mundo amenazador en que vivo, y tu Ley, que es tu Voluntad y tu Amor, son mi seguridad. Te doy gracias, Señor¡
Jesús plantea en el evangelio también nos da opcionesde vida: seguirlo o no, solo que un esta vez con una paradoja: Salvar la vida significa perderla, perder la vida por su causa es salvarla.
Negarnos a nosotros mismos no significa despreciarnos o pensar que no valemos nada, sino aprender a salir de nuestro egoísmo, dejar de poner siempre nuestro “yo” en el centro y abrirnos a los demás. Es renunciar a la comodidad de hacer solo lo que nos gusta y asumir el desafío del amor verdadero, ese que a veces cansa, exige y duele, pero que da frutos de vida.
Cargar con la cruz cada día es aceptar las pequeñas o grandes dificultades que la vida nos presenta y llevarlas con esperanza, sin huir ni quejarnos constantemente. Es el padre o la madre que, aunque estén agotados, siguen dando amor a sus hijos. Es el trabajador que, en medio de dificultades, sigue actuando con honradez. Es la persona que lucha por perdonar, aunque le cueste.
Frente a esta cultura que fomenta el cultivo de EGO, el Señor nos indica que lo importante no es ponerme en el centro, sino pensar en los demás. Y eso, es dar la vida; salir de nosotros mismos, poniendo la causa de Jesús en primer plano; optar por el proyecto del Reino de Dios que nos asegura no sólo una vida feliz, sino el futuro para la generaciones venideras.
La «brújula del cristiano es seguir a Cristo crucificado»: no un falso Dios «desencarnado y abstracto», sino Dios que se hizo carne y que lleva sobre sí «las llagas de nuestros hermanos», nos recomienda el Papa Francisco.
Tomado de:
- Folleto La Misa de Cada Día.
- Diario Bíblico 2025. Misioneros Claretianos.
- Libro Busco Tu Rostro, autor Carlos G. Vallés.
- https://www.vatican.va/content/francesco/es/cotidie/2017/documents/papa-francesco-cotidie_20170302_brujula-creyente.pdf
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2025/03/06/59818/
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
Palabra de Vida Mes Marzo “¿Por qué miras la paja que hay en el ojo de tu hermano y no ves la viga que está en el tuyo?” (Lc 6, 41) https://ciudadnueva.com.ar/marzo-2025/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Marzo 2025.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.