- Jb 1, 6-22
- Sal 16
- Lc 9, 46-50
Hoy el Señor en la litugia nos invita servir, no ser servido, a ser humildes, tener confianza en El, para eso es importante que nos mantengamos en sintonía con El por medio de la oración. Es por eso que con el Salmista le pedimos que escuche nuestras súplicas y nos muestre los prodigios de su misericordia, como los hizo Job.
El libro de Job, pertenece al género de la literatura sapiencial , compartiendo una perspectiva que se considera el “camino de la sabiduría”.
El texto de hoy nos muestra a Job, hombre rico y justo; por ello, según la mentalidad del momento, es un hombre bendecido por Dios. Dios permite la prueba desde la confianza en que Job será un hombre fiel, pese a todas las calamidades que le van a afligir.
La historia de hoy, es una verdadera invitación a reconocer que Dios puede tener un proyecto totalmente distinto para nosotros y para nuestra vida. Esto de ninguna manera quiere decir que sea fácil de aceptar o de entender, sin embargo, es ahí, en medio de nuestros problemas, en donde Dios actuará y nos instruirá. No dejes que tus problemas y adversidades cambien tu idea de Dios, él te ama y te amará siempre.
Y en el Evangelio que viene a complementar esta meditación como anillo al dedo, Jesús, nos pide ser como niños, ser los más pequeños, es decir el servidor fiel. Nos invita a cambiar la manera en que valoramos a las personas y las cosas: los más pequeños, los más humildes, aquellos a quienes solemos pasar por alto, son en realidad los más grandes a los ojos de Dios.
Hasta en siete ocasiones distintas en los evangelios, Jesús presenta a los niños como paradigmáticos. Es curioso porque el siete, en la numerología hebrea es símbolo de la perfección. Ser como niños, por tanto, es el camino de la perfección. La realidad es que nos viene bien recordarlo para volver a dejar el ego abajo, vivir en actitud de pura receptividad y soltar nuestra vida en manos del autor de la misma. La acogida de un niño, símbolo de la inocencia, la vulnerabilidad y la confianza, nos invita a adoptar una actitud de sencillez y apertura hacia los demás. En el mundo actual, donde estamos rodeados de comparaciones y egos, Jesús nos recuerda que la grandeza verdadera no está en la competencia ni en el estatus, sino en la capacidad de amar y acoger con pureza y humildad.
A practicar, como nos explica el Papa Francisco, la docilidad, la necesidad de consejo, la necesidad de ayuda, porque el niño es precisamente el signo de la necesidad de ayuda, de docilidad para ir adelante… Este es el camino. No quién es más grande. Los que están más cerca de la actitud de un niño están más cerca de la contemplación del Padre.
Danos un corazón semejante al tuyo, pedimos uniéndonos a la Oración de los fieles, para que no seamos obstáculo para que otros, por inspiración del Espiritu Santo. Realicen el bien y la verdad; para que entendamos que en el servicio humildes de se encuentra la grandeza de la vida y para que en medio del mal, sepamos confiar en providencia amorosa de Dios.
Textos Consultados:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2024/09/30/ser-pequenos-de-nuevo/
- https://www.evangelizacion.org.mx/liturgia/index.php?i=30-09-2024
- https://es.catholic.net/op/articulos/8025/cat/331/quien-sera-el-mayor.html#modal
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
Palabra de Vida Mes de Setiembre. “Pongan en práctica la Palabra y no se contenten sólo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos” (Santiago 1,22) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Setiembre 2024.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.