- Ecle 1, 2-11
- Sal 89
- Lc 0, 7-9
¿De dónde venimos?, ¿a dónde vamos?, ¿cuál es el sentido de nuestra vida? Estas preguntas existenciales que muchas veces nos roban La Paz, es lo que nos habla la liturgia de hoy.
pasaje del libro del Eclesiastés también llamado “Cohélet” nos presenta la superficialidad de todas las cosas.
“Todas las cosas, absolutamente todas, son vana ilusión”. La expresión del Eclesiastés, destacó el Papa Francisco, puede parecer «un poco pesimista», aunque en realidad «no todo es así: hay gente buena». Pero, explicó Francisco, «el texto quiere poner de relieve esa tentación tan nuestra, que es también la primera de nuestros padres: ser como Dios». La vanidad, en efecto, «nos infla», pero «no tiene larga vida, porque es como una pompa de jabón» y no lleva jamás a «una ganancia auténtica». Sin embargo, el hombre «se preocupa por aparentar, por fingir, por la apariencia». En pocas palabras: «La vanidad es maquillar la propia vida. Y esto enferma el alma, porque uno maquilla la propia vida para aparentar, para parecer, y todas las cosas que hace son para fingir, por vanidad. Pero al final, ¿qué gana?».
El sabio, por más que ha querido encontrar las respuestas de los grandes misterios que preocupan al hombre, como son: ¿de dónde venimos?, ¿a dónde vamos?, ¿cuál es el sentido de nuestra vida?, sólo encuentra un cabal sentido en Cristo, ya que él mismo dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida”.
El Salmista nos indica que la vida es tan breve como un sueño. Hoy nosotros somos testigos de ello, el tiempo pasa velozmente, y ante ello nuestra reacción generalmente es hacer de ellos el mejor uso posible, pues comprendo el valor de este y nos disponemos a aprovechar cada momentos. Así cuando llegue el sufrimiento, pensaré que todo pasará ; y cuando me atraigan placeres, reflexionaré que también elllos son breves, entonces trataré de vivirlos intensamente.
Las diferentes acciones que vamos realizando suponen un posicionamiento por nuestra parte. Ensanchamos o estrechamos el corazón según nuestro comportamiento. De ahí que debamos prestar atención a todo lo que hacemos. Nada es irrelevante. Cada paso que vamos haciendo nos coloca en una dirección
Del texto del evangelio que acabamos de leer, podemos sacar la conclusión que Herodes quería ver a Jesús. Pero su deseo no es como el de otros personajes del Evangelio. Zaqueo, por ejemplo, también quería ver e hizo lo posible para conseguirlo. Todos recordamos su atrevimiento al subirse a una higuera. Pero Herodes, al igual que sus padres cuando le visitaron los Magos, quiere ver sin moverse, porque de hecho le mueve la curiosidad, no el deseo.
Herodes, había empequeñecido demasiado el deseo de su corazón. En lugar de buscar la felicidad plena se contentó con el consuelo de la satisfacción efímera. Por eso cuando tendrá la oportunidad de ver al Señor no le servirá de nada. Le hubiera gustado que realizara un milagro, asistir a un espectáculo religioso que quizás le conmoviera exteriormente, pero no deseaba abrir su corazón.
Herodes está oyendo lo que se dice de Jesús y tiene dudas sobre quién puede ser el personaje. No le preocupa otra cosa; no parece interesado por el mensaje, sino por la persona física de Jesús. ¿Quién es este Jesús del que hemos oído hablar?
En algunos momentos aparece también en mi mente esta pregunta: “¿Quién es Jesús para mí?”. Y la respuesta parece obvia: es el Hijo de Dios vivo. Así me lo enseñaron desde niño. Pero ¿significa algo para mí esta afirmación?, ¿Cambia en algo mi vida? Jesús ha ido pasando por su vida siempre pendiente del Padre; Jesús es un hombre “hijo de hombre”. Él no se considera otra cosa. Por esto siembre le encontraremos orando, hablando con el Padre al que unos pasos más adelante va a llamar ya “ABBA”, que podríamos traducir como “Papá”, incluso como “papaiño”. Esa es, tal vez, la meta a la que nos dirige el fragmento que hoy leemos: qué opinamos, mejor aún: ¿qué sentimos ante Jesús? ¿Cuál es nuestra idea del Jesús que pasa a nuestro lado invitándonos a conocer al Padre, a vivir a Dios como parte nuestra, como horizonte de nuestra vida? Y esto no es vanidad, sino vida verdadera.
Textos Consultados:
- Folleto La Misa de Cada Día
- Livro Busco Tu rostro, autor Carlos G. Vallés.
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2024/09/26/la-inutilidad-de-la-curiosidad/
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://www.vatican.va/content/francesco/es/cotidie/2016/documents/papa-francesco-cotidie_20160922_osteoporosis-alma.html
- https://www.evangelizacion.org.mx/liturgia/index.php?i=26-09-2024
Palabra de Vida Mes de Setiembre. “Pongan en práctica la Palabra y no se contenten sólo con oírla, de manera que se engañen a ustedes mismos” (Santiago 1,22) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Setiembre 2024.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.