https://youtu.be/qBK2YdTQFxE?si=0hUj9PX0FzA8JntW
- Ez 34, 11-12. 15-17
- Sal 22
- 1 Cor 15, 20-26. 28
- Mt 25, 31-46
Celebrando la fiesta de Jesucristo Rey del Universo, se abre un camino para construir esa fraternidad universal. Una luz para toda la humanidad oprimida por violencias y guerras. También una llamada urgente para la misma Iglesia que cada día necesita nueva conversión a Jesucristo y reforma contante para ser totalmente Iglesia identificada con el reino de Dios
En las tres lecturas de la liturgia de hoy se ve la unidad: Cuando el pueblo judío está sufriendo el destierro en Babilonia, el sacerdote y profeta Ezequiel recuerda que Dios es el buen pastor que cuida siempre de su pueblo y cura sus heridas. Yo mismo apacentaré mis ovejas... La figura del pastor ha pasado a ser en el oriente antiguo una imagen muy utilizada para expresar la tarea del rey. La imagen sugiere la idea de la solicitud y la preocupación del rey por los súbditos y, por tanto, ser rey no es un privilegio sino una misión y un compromiso siendo el guía que va por delante del pueblo para protegerlo y defenderlo como hacen los pastores con el rebaño. Ha de mirar primariamente por el bien común del pueblo que se le ha encomendado.
En la segunda lectura san Pablo anima la esperanza en los fieles cristianos de Corinto: nuestro destino es la victoria sobre la muerte. Todos somos invitados a vivir en la esperanza firme de un final definitivamente feliz para todos. Y la realización de este magno proyecto tiene un proceso y un orden: el primero en experimentar la fuerza de este poder vivificador fue Jesús mismo. Él es la primicia y, a través de él, alcanzará a toda la humanidad. Después de Jesús resucitarán también todos los cristianos, pero cuando él vuelva. Lo que ahora se participa simbólica y sacramentalmente será una realidad total y acabada cuando vuelva el Señor Jesús glorioso.
Y en esa perspectiva debemos leer el evangelio en la festividad de Jesucristo rey del universo.
Jesucristo es rey del Universo. Pero no sólo por su condición divina, también en su humanidad. El Padre le ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. La humanidad herida y salvadora que está sentada a la derecha del Padre recibió esa dignidad. No en vano había comprado a los hombres con su sangre.
Jesús es Rey y quiere reinar. Quiere hacerlo en los corazones, en las familias y también en la sociedad. No le tengamos miedo. Como indica el prefacio de esta Misa, el suyo es un reinado de justicia, de gracia, de libertad, de verdad y de vida, de amor y de paz.
Este pasaje evangélico, que nos hace tocar con los pies en el suelo, pone la fiesta del juicio de Cristo Rey en su sitio. La realeza de Cristo es una cosa bien distinta de la prepotencia, es simplemente la realidad fundamental de la existencia: el amor tendrá la última palabra.
Jesús nos muestra que el sentido de la realeza -o potestad- es el servicio a los demás. Él afirmó de sí mismo que era Maestro y Señor (cf. Jn 13,13), y también que era Rey (cf. Jn 18,37), pero ejerció su maestrazgo lavando los pies a los discípulos (cf. Jn 13,4 ss.), y reinó dando su vida. Jesucristo reina, primero, desde una humilde cuna (¡un pesebre!) y, después, desde un trono muy incómodo, es decir, la Cruz.
Encima de la cruz estaba el cartel que rezaba «Jesús Nazareno, Rey de los judíos» (Jn 19,19): lo que la apariencia negaba era confirmado por la realidad profunda del misterio de Dios, ya que Jesús reina en su Cruz y nos juzga en su amor. «Seremos examinados sobre el amor».
El Papa
Francisco ha querido aclarar que rey festejamos hoy, pues celebramos un rey que “se hizo siervo para que cada uno de nosotros se sienta hijo” ha dicho el Papa, pero también un rey que “se dejó insultar y que se burlaran de él, para que en cualquier humillación ninguno de nosotros esté ya solo. Dejó que lo desnudaran, para que nadie se sienta despojado de la propia dignidad, y subió a la cruz, para que en todo crucificado de la historia esté la presencia de Dios”.
“Este es nuestro rey – asegura Francisco – rey del universo, porque Él cruzó los más recónditos confines de lo humano; entró en la oscura inmensidad del odio y del abandono para iluminar cada vida y abrazar cada realidad”.
Al mismo tiempo, nos invita a reflexionar sobre la frase que Jesús pronuncia en el Evangelio: «Estarás conmigo en el paraíso». “Esto es lo que quiere decirnos Dios cada vez que nos dejamos mirar por Él. Y entonces entendemos que no tenemos un dios desconocido que está allá arriba en el cielo, poderoso y distante, sino un Dios cercano, tierno y compasivo, cuyos brazos abiertos consuelan y acarician” afirma el Papa.
Por eso con la Oración de los Fieles pidamos al Señor que reine entre nosotros.
Fuentes:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://www.dominicos.org/predicacion/homilia/26-11-2023/comentario-biblico/gerardo-sanchez-mielgo/
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2023/11/26/reconocer-la-desnudez-de-cristo-rey/
- https://webcatolicodejavier.org/evangeliodeldia.html
- https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2022-11/papa-en-asti-jesus-no-es-rey-con-insignias-es-rey-con-espinas.html
Palabra de Vida Mes de Noiembre 2023
“Pues todos vosotros sois hijos de la luz e hijos del día; nosotros no somos de la noche ni de las tinieblas» 1 Tes 5, 5-6 https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida. Octubre 2023
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Noviembre 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.