- Eclo 1, 1-10
- Sal 92
- Mc 9, 14-29
Hoy en la liturgia nos cuestiona nuestra falta de fe y de compromiso.
En la primera lectura se nos habla sobre la sabiduría, esa que viene de Dios que es trascendente, misteriosa e insondable.
El sabio es quien conduce su mirada hacia la cabeza de la iglesia que es Cristo, quien tiene fe en su poder para hacer retroceder el mal y la enfermedad.
Iniciamos el Libro del Eclesiástico, también conocido como el Libro de Sirácida) es el más extenso de los libros deuterocanónicos de la Biblia y el último de los escritos sapienciales en la Vulgata del Antiguo Testamento.
El texto de hoy, nos habla de que la sabiduría de Dios es el fundamento de todo lo que existe. Casi desde una forma poética ayuda a reflexionar sobre el misterio de todo lo creado.
El ser humano de todos los tiempos ha querido profundizar sobre el origen y los interrogantes que nos asaltan a lo largo de nuestra existencia. Y con facilidad nos topamos con la limitación del intelecto humano, incapaz de abrazar de una manera absoluta todos los misterios que encierra el universo. ¿Quién puede comprender la profundidad de lo que lo sostiene todo?
Al avanzar la propia reflexión que sobre sí, hace el cristianismo, se le va a dar la importancia a Jesucristo como la sabiduría que estaba junto al Padre. Y, es, Él mismo Cristo quien da la consistencia a todo. Como desde el principio se derrama esa sabiduría sobre los vivientes, se reparte en aquellos que son capaces de abrirse al Creador. Su Palabra, tiene sabiduría y sus mandatos dan inteligencia y prudencia. Todo un proceso de generar esa plenitud de Vida en la creación, en los vivientes, cuando despiertan a percibir una sabiduría a la hora de regir su existencia que los lleva a Dios.
El salmo nos dice que, “ el Señor Reina vestido de majestad. “ Mi vida es más fácil Señor, porque tú eres Rey. Mi futuro está asegurado, porque tu reino sobre todos los tiempos. Mi salvación está conseguida porque tu, Dios omnipotente, eres mi Redentor. Tu poder en la garantía de mi fe.
En el pasaje del evangelio, nos dice el Papa Francisco, “Jesús se abaja y toma al niño». Son precisamente «estos gestos de Jesús los que nos hacen pensar». En efecto, «cuando Jesús cura, cuando va entre la gente y cura a una persona, jamás la deja sola». Porque «no es un mago, un brujo, un curandero que va y cura» pero luego sigue por su camino. Él, en cambio, «hace que cada uno vuelva a su sitio, no lo deja por el camino».
El padre del muchacho está en un proceso de búsqueda de luz en su vida, ante una situación que desborda por completo su realidad existencial. No sé lo que voy a hacer. Y, en ese momento aparece un horizonte de luz en su vida. Se presenta Jesús, trasfigurado. Por eso le ruega que tenga piedad. Y de una forma ráquitica le insinúa que si puede hacer algo. Jesús, entra en acción, para poner a prueba la fe de este hombre. ¿Sí puedo?, basta con que tengas fe. De este modo, el padre comprende la limitación humana y la debilidad de la fe cuando nos vamos encontrando los obstáculos en lo ordinario de la vida. Ahora, se hace más honda y profunda la fe del padre, que se manifiesta como un grito. Soy consciente de que creo, pero en más de una ocasión me desborda la vida con sus contrariedades. ¡Ayúdame!
Oración de súplica, que sale de la pureza del corazón de este padre desesperado: Ayúdame, tú que eres la resurrección y la vida. Así sucede el milagro. Ahora Jesús actúa, se acerca al muchacho y lo levantó, o lo transfiguró, mediante la fuerza del Espíritu Santo fue capaz de generar en el muchacho algo que antes no podía pronunciar: «Palabra».
Al igual que el joven poseído, muchos jóvenes enfrentan situaciones adversas que ponen en peligro sus vidas. Muchos padres también claman por ayuda y buscan esperanza en medio de la oscuridad; pero los clamores vienen de muchas partes y nos interpelan. Al igual que Jesús demostró compasión y poder liberador, existen organizaciones e instituciones que trabajan a favor de los jóvenes en situaciones de vulnerabilidad y desempeñan un papel crucial en la lucha contra la violencia y la explotación. Entonces, este mensaje, nos interpela acerca de cómo contribuir a crear espacios donde se trate a los jóvenes con respeto y se les ofrezcan oportunidades.
Tomado de:
- Folleto La Misa de Cada Día.
- Diario Bíblico 2025. Misioneros Claretianos.
- Libro Busco Tu Rostro, autor Carlos G. Vallés.
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://www.vatican.va/content/francesco/es/cotidie/2014/documents/papa-francesco_20140224_regreso-a-casa.html
Palabra de Vida Mes Febrero. Examínenlo todo y quédense con lo bueno” (Primera carta a los tesalonicenses 5, 21 https://ciudadnueva.com.ar/febrero-2025/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Febrero 2025.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.