https://youtu.be/UfOVRkSzXUQ
- Is 49, 1-6
- Sal 138
- Hch 13, 22-26
- Lc 1, 57-66. 80
La solemnidad de mañana, Sagrado Corazón de Jesús, hace que los responsables de la Liturgia adelanten la fiesta de san Juan Bautista al día de hoy, 23 de junio.
La liturgia nos invita a vivir como él nuestra misión de una manera sincera y de corazón y con nuestro testimonio como él seamos también anunciadores del Reino de Dios.
La misión de este niño es ser “luz de las naciones”, anunciar la salvación universal, “hasta el confín de las naciones”. La luz que aportó Juan fue la que permitió descubrir a Jesús, el verdadero salvador, la referencia universal de la salvación.
Juan nace en circunstancias poco comunes: de unos padres ancianos y después del anuncio de un ángel que deja sin habla al padre. Aun así, el resto de sus parientes no se puede aguantar las ganas y se reúnen a discutir cuál será el nombre del niño. Ellos no saben que incluso esto ha sido zanjado por Dios: “lo llamarás Juan” (Lc 1,13).
Nos explica el Papa Francisco: “La página evangélica del día, anuncia el nacimiento y luego se detiene en el momento de la imposición del nombre al niño. Isabel elige un nombre extraño a la tradición familiar y dice: «Se llamará Juan», don gratuito y también inesperado, porque Juan significa «Dios ha hecho la gracia». Y este niño será heraldo, testigo de la gracia de Dios para los pobres que esperan con humilde fe su salvación”
Cada detalle de este nacimiento fue planeado por Dios. Así como con Juan, Dios se preocupa por cada uno de nosotros, incluso más de lo que imaginamos. Sólo Él nos conoce tal cual somos, con toda nuestra historia, y nos ama por lo que somos: sus hijos, sus hermanos, sus amigos.
La primera lectura hace alusión a la llamada de Dios cuando el ser humano está aún en el seno materno: “El Señor me llamó desde el vientre materno, de las entrañas de mi madre, y pronunció mi nombre.”
La segunda lectura, recoge un discurso de Pablo que también habla de mensaje de salvación. Juan Bautista es quien “predicó a todo el pueblo un bautismo de conversión”, quien proclama la realidad salvífica de quien es superior a él, que señala con la expresión que recogerán los evangelistas. “no soy digno de desatarle las sandalias”.
San Lucas señala cómo el niño que está en el seno de Isabel reacciona ya ante la presencia de María portando a su vez en su seno a Jesús. Se suele interpretar como el momento de santificación de Juan. Por eso celebra la Iglesia su nacimiento, cuando lo que se suele celebrar en los santos es el momento final de la vida, el nacimiento a otra vida. En Juan, sus actitudes de Precursor, manifestadas en su oración atenta al Espíritu, en su fortaleza y su humildad, nos ayudan a abrir horizontes nuevos de santidad para nosotros y para nuestros hermanos.
“Te voy a convertir en luz de las naciones para que mi salvación llegue hasta los últimos rincones de la tierra”, nos dice el Señor hoy a cada uno de nosotros. Necesitamos para ello tiempo de oración, reflexión; vivir en nuestra sociedad sin dejarnos envolver por la aceleración de procesos, de la búsqueda de la satisfacción inmediata, o entregados a una actividad que no contrastamos en nuestro interior a la luz del evangelio; dejándonos a arrastrar por lo prescindible, a costa de no dar tiempo a lo imprescindible que conforma nuestro ser humano, cristiano. Necesitamos desierto como Juan que “vivió en el desierto hasta el día en que se dio a conocer al pueblo de Israel”; nosotros también para descubrir el proyecto de Dios sobre cada uno y saber con audacia mostrar a Jesús en nuestro mundo. Como Juan Bautista hizo en el suyo.
Terminamos esta reflexión con el Salmista dando gracias a Dios porque El nos conoce profundamente, nos ha formado maravillosamente y nos ha tejido en el seno materno.
Bibliografía:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://es.catholic.net/op/articulos/67751/cat/504/juan-es-su-nombre.html#modal
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- http://webcatolicodejavier.org/evangeliodeldia.html
- https://www.vaticannews.va/es/evangelio-de-hoy.html
Palabra de Vida Mes de Junio 2022
«Tú eres mi Señor, mi bien, nada hay fuera de ti» (Sal 16, 2) https://www.focolare.org/espana/es/news/category/parola-di-vita/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Junio 2022.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.