https://youtu.be/uKy_1DwKO1E?si=BAGbyattyuiioG5v
- Sof 3, 14-18 ; o bien Cant 2, 8-14
- Sal 32
- Lc 1, 39-45
La liturgia nos va encaminando cada día más hacia el encuentro con el Señor que ya viene a morar entre nosotros y a darnos la Salvación. Así lo creemos los cristianos que hemos experimentado un encuentro con El, pues ya conocemos lo grande que es su Amor.
Es por eso que María como nos indica San Lucas ante la Anunciación, se encamina presurosa a visitar a su prima Isabel. Ante esto la primera lectura nos invita a gozarnos y regocijarnos de todo corazón, pues el Señor que ya viene será el Rey y ya no temeremos mal alguno y el Salmista nos motiva a darle gracias porque en El está puesta nuestra esperanza por eso se alegra nuestros corazón y en El confiamos. Dios acompaña a su pueblo necesitado de su presencia salvadora
María, afirma el Papa Francisco, “ después de la anunciación, hubiera podido concentrarse en sí misma, en las preocupaciones y temores debidos a su nueva condición. Pero no; ella confió plenamente en Dios. Pensaba más bien en Isabel. Se levantó y salió a la luz del sol, donde hay vida y movimiento. Aunque el impactante anuncio del ángel haya provocado un “terremoto” en sus planes, la joven no se dejó paralizar, porque en ella estaba Jesús, el poder de la resurrección. Dentro de ella ya estaba el Cordero inmolado, pero siempre vivo. Se levantó y se puso en marcha, porque estaba segura de que los planes de Dios eran el mejor proyecto posible para su vida. María se convirtió en el templo de Dios, imagen de la Iglesia en camino, la Iglesia que sale y se pone al servicio, la Iglesia portadora de la Buena Noticia.”
Ella no acude al auxilio de Isabel en nombre propio, ni por propia voluntad. Es Dios quien inspira este deseo en su corazón y en su nombre se pone en camino y a su servicio. Por eso el quehacer del cristiano se llama caridad y va mucho más allá de la simple compasión o solidaridad (tan de moda, pero tan fría a la vez). La caridad es actuar con Dios, es pedirle protección ayuda física y espiritual para llevar a cabo la misión encomendada. Eso es seguidores de Jesús y de María. Ella nos lo enseña hoy, mucho antes que el Maestro nazca y pueda con su ejemplo enseñarnos a vivir. María hoy se pone en camino por deseo de Dios, María va a servir en nombre Dios, va a compartir la alegría de un nacimiento próximo, pero también a compartir las fatigas propias de la mujer en este estado y que solo otra mujer sabe comprender y aliviar. María hoy se siente feliz y ora agradecida con su Magníficat. Sí, se siente feliz, no solo porque lo que le ha dicho el Señor se cumplirá, sino porque el cumplimiento de la promesa es para todo Israel, porque la misericordia de Dios llega a todos sus fieles de generación en generación. Porque el que tiene a Dios como Señor y Salvador, confía y no teme.
El Evangelio de hoy nos invita a reflexionar sobre varios aspectos importantes. En primer lugar, nos muestra la importancia de la comunión y el apoyo mutuo entre familiares y amigos en momentos de alegría y dificultad
Además, esta lectura nos enseña sobre la humildad y la fe. Tanto María como Isabel son ejemplos de mujeres que asumieron el sueño que Dios tuvo para sus vidas. Isabel reconoce la bendición de María, llamándola “bendita entre las mujeres”, y María alabando a Dios por su grandeza y misericordia. Estas actitudes nos recuerdan la importancia de reconocer los sueños que Dios tiene para nuestras vidas.
La lectura del Cantar de los Cantares muestra una alegoría del amado, la venida de Jesús que viene, se muestra, pero también quiere escuchar nuestra voz, quiere ver nuestro rostro. En resumen, se describe, con el nacimiento de Mesías, una perfecta comunión entre Dios y la Humanidad.
¡Qué mejor manera de celebrar la llegada del Mesías que con la mejor música! Dios ha trazado un plan para todas las generaciones, que culmina con la llegada de Jesús. Por eso nuestra alma debe esperar en el Señor, Él será nuestra liberación.
Se llene nuestro corazón en este día de agradecimiento por la fidelidad de Dios para con nosotros. Se renueven nuestras fuerzas de predicar el nombre de Dios por toda la tierra. Para que todos puedan conocer la alegría y la grandeza de ese Dios que se hace hombre por tenerte cerca, que se complace, te ama y se goza por tu repuesta como en día de fiesta.
Terminamos con la Antifona de la O (Oriens), diciéndoles al Señor: “Oh Sol que naces de lo alto, Resplandor de la luz eterna, Sol de justicia: ven ahora a iluminar a los que viven en tinieblas y en sombra de muerte.”
Fuentes:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/31-5-2013/#:~:text=Lectura%20de%20la%20profec%C3%ADa%20de%20Sofon%C3%ADas%203%2C%2014%2D18&text=El%20Se%C3%B1or%20ha%20cancelado%20tu,es%20un%20guerrero%20que%20salva.
- https://liturgiapapal.org/index.php/manual-de-liturgia/m%C3%BAsica-lit%C3%BArgica/395-las-ant%C3%ADfonas-de-la-o.html
- https://www.vatican.va/content/francesco/es/messages/youth/documents/papa-francesco_20220815_messaggio-giovani_2022.html
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
Palabra de Vida Mes de Diciembre 2023
““Estén siempre alegres. Oren sin cesar. Den gracias a Dios en toda ocasión: esto es lo que Dios quiere de todos ustedes, en Cristo Jesús” (Primera Carta a los Tesalonicenses, 5, 16-18) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Diciembre 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.