https://youtu.be/Q7FCq2rFzks
- 2 Mac 7, 1. 20-31
- Sal 16
- Lc 19, 11-28
Un texto para nuestra meditación, nos presenta la primera lectura en el libro de los Macabeos, en el podemos ver lo que significa realmente el amor a Dios y la fidelidad a sus mandamientos y a la Alianza. El desprecio total que una persona puede llegar a hacer con tal de permanecer fiel al amor y al don recibido por Dios. Hemos leído cómo toda la familia, desde el mayor al menor, desprecian todo con tal de permanecer fieles a Dios.
Es importante que hoy revisemos este aspecto de nuestra vida y veamos ¿Qué tanto amamos a Dios? ¿Qué tanto estaríamos dispuestos a decir, como nuestros mártires?. ¿Seremos los cristianos del siglo XXI capaces de sentirnos orgullosos de ser cristianos y poner en juego todo con tal de proclamar abiertamente que Jesús es el Señor y que bajo ninguna circunstancia lo negaríamos? Para saber si seremos o no capaces de esta entrega, simplemente veamos qué tan fácilmente podemos renunciar a aquello que tanto nos gusta pero que no agrada al Señor. Si podemos hacer esto, estamos en el camino de la fidelidad.
Hoy celebramos a Santa Isabel de Hungría. Hija del rey Andrés II de Hungría, tuvo hijos y enviudó joven. Fue muy cercana a los franciscanos y su vida fue austera, de caridad y de renuncia, en contraste con el fasto de la corte. Se dedicó asiduamente a la oración y a las obras de caridad, abrazó voluntariamente la pobreza, y fundó un hospital en el que servía personalmente a los enfermos.
Con la Oración Colecta, pidamos al Señor que nos conceda como a esta Santa, el don de reconocer, honrar y servir a Cristo.
Y como nos explica el Papa Francisco: “Conservar y proteger la memoria: la memoria de la salvación, la memoria del pueblo de Dios, esa memoria que hizo fuerte la fe de este pueblo perseguido por esa colonización ideológica-cultural. Proteger la memoria es lo que hoy nos ayuda a superar todo sistema educativo perverso. Conservar el recuerdo. Recordar los valores, recordar la historia, recordar las cosas que hemos aprendido de nuestros padres. La madre de estos macabeos es un ejemplo. –el texto repite dos veces que la madre hablaba a sus siete hijos– ‘en la lengua de los padres’: les habló en dialecto. Y no hay colonización cultural que pueda superar el dialecto”
La lección de la parábola del evangelio de hoy, nos comenta Fray Emilio García Alvarez O. P., sirve para todos los tiempos, aunque los contemporáneos de Jesús estuvieran persuadidos de que el fin llegaría enseguida. Se trata de emplear inteligentemente y sin demora los bienes que se poseen, que son un don de Dios, y de hacerlos fructificar. El que así obra es digno de elogio y el Señor se mostrará generoso con él; mientras que al negligente se le retirará en lo sucesivo la confianza que se había depositado en él.
Se nos han dado gratuitamente múltiples bienes: vida, salud, trabajo, fe, hermanos, bienes materiales,… ¿Qué hemos hecho de todo ese caudal recibido? ¿Lo hemos agradecido de buena gana y lo hemos puesto al servicio de los demás? ¿O nos hemos preocupado ante todo de lo que Dios nos va a dar y de ser los primeros en disfrutar de sus beneficios, incluso ya en este mundo?
Palabra de Vida Mes de Noviembre 2021
“Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios” (Mateo 5, 9) https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Noviembre 2021.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.