- Heb 2, 5-12
- Sal 8
- Mc 1, 21b-28
Hoy la liturgia nos habla del gran Amor que nos tiene Dios y de la autoridad que manifiesta en su Hijo, el Amado, pero no es una autoridad despota, es una autoridad con cercanía y ternura.
En la lectura de hoy, nos queda caro que Dios creador y fin de todo, ha considerado al hombre tan importante que lo ha convertido en hijo. Y así, con Jesús, Dios se ha hecho solidario de nuestra condición, hasta el fondo, en su Unigénito. Con ese motivo se recuerda el salmo 8, un himno cuyo tema principal es que el hombre, a pesar de su aparente insignificancia, es creado por Dios como maestro de la creación.
Nos explica el Papa Francisco: “El evangelista san Marcos relata que Jesús, al ser sábado, fue inmediatamente a la sinagoga y comenzó a enseñar. Esto hace pensar en el primado de la Palabra de Dios, Palabra que se debe escuchar, Palabra que se debe acoger, Palabra que se debe anunciar. Al llegar a Cafarnaún, Jesús no posterga el anuncio del Evangelio, no piensa en primer lugar en la ubicación logística, ciertamente necesaria, de su pequeña comunidad, no se demora con la organización. Su preocupación principal es comunicar la Palabra de Dios con la fuerza del Espíritu Santo. Y la gente en la sinagoga queda admirada, porque Jesús «les enseñaba con autoridad y no como los escribas»
¿Qué significa «con autoridad»? Quiere decir que en las palabras humanas de Jesús se percibía toda la fuerza de la Palabra de Dios, se percibía la autoridad misma de Dios, inspirador de las Sagradas Escrituras. Y una de las características de la Palabra de Dios es que realiza lo que dice. Porque la Palabra de Dios corresponde a su voluntad. En cambio, nosotros, a menudo, pronunciamos palabras vacías, sin raíz o palabras superfluas, palabras que no corresponden con la verdad. En cambio, la Palabra de Dios corresponde a la verdad, está unida a su voluntad y realiza lo que dice.”
Ante el milagro crece el estupor de los asistentes de tal forma que inquieta los corazones de los asistentes: “¿qué es esto? Una doctrina nueva llena de autoridad. ¡Manda incluso a los espíritus inmundos y estos le obedecen!”
Reflexionemos: ¿Qué admiro más en la persona de Jesús? ¿Tiene Jesús autoridad en mi vida? ¿Dónde lo percibo y en qué lo manifiesto?
Y es que Él ha venido a liberar a los pobres, a los enfermos y a los perdidos en medio de este mundo. Eso es lo que le hace “profeta poderoso en obras y palabras” como nos recordarán más tarde los caminantes de Emaús.
Que la autoridad de nuestras vidas, sea la de servir con amor a quien más lo necesite.
Tomado de:
- Folleto La Misa de Ada Día
- Diario Bíblico 2025. Misioneros Claretianos.
- https://www.vatican.va/content/francesco/es/angelus/2015/documents/papa-francesco_angelus_20150201.html#
- https://oracionyliturgia.archimadrid.org/2025/01/14/todo-lo-sometiste-bajo-sus-pies-2/
- https://www.evangelizacion.org.mx/liturgia/index.php?i=14-01-2025
- https://www.evangelizacion.org.mx/liturgia/index.php?i=14-01-2025
Palabra de Vida Mes Enero “¿Crees esto?” (Juan 11, 26) https://ciudadnueva.com.ar/enero-2025/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Enero 2025.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.