https://youtu.be/aSNp1_04OP8?si=nSrX_4Y3ZYKIDNAH
- Ex 32, 87-14
- Sal 1o5
- Jn 5, 31-47
Hoy la liturgia nos confronta con nuestra fe y con nuestra búsqueda de la Gloria. La primera lectura y el salmo, el Señor, nos cuestiona igual que al pueblo de Israel, acerca de cómo nos desviamos del camino, con cuánta facilidad caemos en perversiones No es cierto que nosotros cambiamos a Dios, nos olvidamos que envió a su Hijo y con su sangre nos salvó. . ¿Qué habría sido del pueblo de Israel y, qué sería de nosotros, sin personas como Moisés, que incesantemente oran a Dios para que derrame su amor y su misericordia sobre nosotros, sobre todo cuando nos encontramos lejos de él?
La paciencia y la misericordia divinas mencionadas en el pasaje nos recuerdan la importancia de la compasión y la tolerancia en nuestras interacciones cotidianas. En un mundo dividido, la llamada a la reconciliación y la comprensión mutua es reflejo de la gracia divina que perdona y busca la restauración.
En definitiva, la lectura del Éxodo nos sirve de recordatorio de que, a pesar de los cambios en la sociedad a lo largo del tiempo, las dinámicas fundamentales entre la Humanidad, la desviación de principios y la necesidad de oración y misericordia divina siguen siendo importantes en la vida moderna.
En el texto del Evangelio el Señor nos dice ¿Como va a ser posible que crean ustedes, que aspiren a recibir gloria los unos de los otros y no buscan la Gloria que solo viene de Dios?
Fuimos creados para la gloria de Dios». Esta es una declaración absoluta, inmutable y cierta respecto a todas las criaturas, pero de manera especial, respecto a los hijos de Dios. Fuimos redimidos para Su gloria; rescatados por Dios, para alabanza de la gloria de Su gracia (Ef 1:6), o sea, la Gloria de Dios es nuestra razón de ser, nuestra gran necesidad y nuestro anhelo supremo.
Sin embargo, me parece que muchas veces limitamos esta verdad a nuestras acciones, cuando la gloria de Dios debería impactar todo nuestro ser. No se trata solo de hacer cosas para la gloria de Dios, sino que abarca mucho más. Según la Biblia, que seamos hechos para Su gloria significa que fuimos creados y redimidos para ver y conocer Su gloria y, entonces, poder vivir y actuar para ella.
Sin embargo, como nos explica el Papa Francisco: “Todos nosotros, si hoy nos paramos un poco y miramos nuestro corazón, veremos cuántas veces — ¡cuántas veces! — hemos cerrado los oídos y cuántas veces nos hemos convertido en sordos». «Cuando un pueblo, una comunidad, pero decimos también una comunidad cristiana, una parroquia, una diócesis —explicó el Pontífice— cierra los oídos y se hace sorda a la Palabra del Señor, busca otras voces, otros señores y termina con ídolos, los ídolos que el mundo, la mundanidad, la sociedad les ofrece». Se aleja, de hecho, «del Dios vivo». Es un proceso negativo que conduce del «no escuchar la Palabra de Dios» al alejarse, por tanto, al «corazón endurecido, cerrado en sí mismo», hasta perder «el sentido de la fidelidad». (…) es entonces que «nos convertimos en católicos “infieles”, católicos “paganos” o, más feo todavía, católicos “ateos”, porque no tenemos una referencia de amor al Dios viviente». Ese «no escuchar y dar la espalda» que «nos hace endurecer el corazón», lleva por tanto al hombre «en el camino de la infidelidad.”
Yo he venido en nombre de mi Padre y ustedes no me han recibido; nos dice Jesús. Debemos tomar la decisión de vivir para la gloria de Dios lo que significa no solo hacer cosas, sino también, y en primer lugar, ver y conocer la Gloria de Jesús.
Nuestra vida es transformada a medida que contemplamos, consideramos y admiramos la gloria de Cristo. Hemos visto y debemos seguir viendo a Cristo con los ojos de la fe, hasta que nos encontremos cara a cara con Él (1 Jn 3:3). Dios lo envió para darnos la Salvación, no dudemos de El; hoy nos invita a buscar la Gloria de Dios y para ello ante todo debemos despojarnos de nuestro amor propio, para que sea su Amor el que more en nuestro corazón y nuestro testimonio sea creíble
Fuentes:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://www.evangelizacion.org.mx/liturgia/index.php?i=14-03-2024
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/
- https://www.vaticannews.va/es/evangelio-de-hoy/2024/03/14.html
- https://www.coalicionporelevangelio.org/articulo/creados-redimidos-ver-gloria-dios/
Palabra de Vida Mes de Marzo 2024. “Crea en mi, oh Dios un corazón puro, renueva en mi interior un espíritu firme”. Sal 51,12 https://www.focolare.org
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Marzo 2024.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.