https://youtu.be/dvSZJKLNKbI
- 1 Jn 5, 5-13
- Sal 147
- Mc 1, 7-11
Seguimos en pleno ciclo de Adviento y de Navidad, ciclo que concluye con la fiesta del Bautismo del Señor, el próximo 9. Hoy la Iglesia celebraba la fiesta de la Epifanía, ahora se trasladó para el domingo.
San Juan nos recuerda, en la primera lectura, que “quien tiene al Hijo, tiene la vida; quien no tiene al Hijo, no tiene la vida”. Sigue la lógica de lo dicho en su evangelio, en el que nos ha presentado a Jesús como “la Palabra y… en ella estaba la vida”, como “el pan de vida”, como el que ha venido “para que tengamos vida y vida en abundancia”. ¿Quiénes somos los cristianos? Los que nos hemos topado con Jesús. Él se ha hecho el encontradizo con nosotros y nos ha convencido de que él es “el camino, la verdad y la vida”. Por eso, acudimos a él constantemente para saciar nuestro fuerte anhelo de vida y alejar de nosotros la muerte y los signos de muerte: la tristeza, el dolor, la desilusión, la pena, el sinsentido, el vacío…, pues como nos dice Sal 111 (antífona): “Una luz se levanta en las tinieblas para los hombres de corazón recto: el Señor clemente, justo y compasivo.”
Para mantener una relación de amistad con Jesús para que él nos pueda regalar constantemente vida… hace falta un trato continuo con El, sobretodo a través de la oración.
Marcos nos dice que Jesús vino de Nazaret y se hizo bautizar por Juan en el Jordán. Es en ese momento que Jesús escucha las palabras: “Tu eres mi Hijo, el Amado, al que miro con cariño”. Marcos nos la describe como una revelación íntima y personal que sólo Jesús oye. El Hijo Amado aparece al comienzo de su vida pública identificado con el rey Mesías cuya misión no se realizará desde el poder, sino desde el testimonio humilde de su condición de servidor de todos.
La lectura de hoy nos presenta tres ideas importantes:
- El bautismo de Jesús en el Jordán es el inicio de un tiempo nuevo, marcado y guiado por la acción amorosa del Espíritu.
- Nuestro Bautismo también nos envía a ser portadores del mensaje del Reino de Dios.
- Al descender sobre Jesús, el Espíritu Santo lo unge para su ministerio.
Afirma el Papa Francisco: “Todos somos hijos de Dios”. Esto es lo que el Santo Niño nos dice. Nos recuerda nuestra identidad más profunda. Todos somos hijos de Dios, miembros de la familia de Dios. San Pablo nos ha dicho que hemos sido hechos hijos adoptivos de Dios, hermanos y hermanas en Cristo. Eso es lo que somos. Ésa es nuestra identidad.”
En efecto, por el bautismo nos hacemos hijos de Dios. Somos curados del pecado original. Gracias a este sacramento se nos abren las puertas del cielo y comenzamos a ganar méritos en la gran competición que es la vida. Dios nos da su gracia. A nosotros nos corresponde hacerla fecunda, hacerla crecer día tras día. ¿Hasta dónde? «Y descendió el Espíritu Santo en forma corporal, como una paloma, sobre Él, y se dejó oír del cielo una voz: “Tú eres mi Hijo amado, en Ti me complazco”. Hemos de lograr que el Padre también exclame de cada uno de nosotros: “Éste es mi hijo amado… en él me complazco…” Y todo ello porque tratamos de agradarle en todo, correspondiendo a ese don tan maravilloso que nos vino por el bautismo, el don del Espíritu Santo.
Aleluya, aleluya. En el esplendor de la nube se oyó la voz del Padre que decía: “Este es mi Hijo mandado; escúchenlo”. Mt 17, 5 (aclamación antes del Evangelio. Con el Salmista, bendigamos al Señor, démosle Gloria y rindámosle honores.
Bibliografía:
- Folleto La Misa de Cada Día
- https://www.miamiarch.org/atimo_s/news/ccs_s_090111.pdf
- https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/11-1-2014/
- https://es.catholic.net/op/articulos/67924/cat/330/es-dificil-de-creer-sin-embargo-es-asi.html#modal
- http://es.catholic.net/op/articulos/49113/enviado49113.html#modal
Palabra de Vida Mes de Enero 2023
«Aprendan a hacer el bien, busquen la justicia» (Is 1, 17). https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Enero 2023.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.