- Lam 2, 2. 10-14. 18-19
- Sal 73
- Lc 2, 41-51
“María conservaba todas esas cosas en su Corazón”, nos dice el evangelio hoy y con ello hoy en la Celebración del Corazón Inmaculado de María.
Corazón, en el lenguaje de la Biblia, se refiere a lo más profundo de la persona, de donde emanan todos sus pensamientos, palabras y obras. ¿Qué emana del corazón de María? Fe, obediencia, ternura, disponibilidad, espíritu de servicio, fortaleza, humildad, sencillez, agradecimiento, y toda una estela inacabable de virtudes.
¿Por qué? La respuesta la encontramos en las palabras de Jesús: «Donde está tu tesoro allí estará tu corazón» (Mt 6,21). El tesoro de María es su Hijo, y en Él tiene puesto todo su corazón; los pensamientos, palabras y obras de María tienen como origen y como fin contemplar y agradar al Señor.
Hoy la liturgia nos invita a convertir nuestro corazón y meditar atentos todo aquello que viene del Señor,
El corazón de la Virgen María tuvo, a lo largo de su vida, muchas cosas sobre las que meditar, desde el anuncio y nacimiento de su Hijo, hasta su muerte y resurrección y la venida del Espíritu.
Nosotros como ella, aunque a veces no comprendamos, debemos saber que Jesús siempre va con nosotros y pedirle al Señor, un corazón como el de María, aunque podría parecer osado, pero es ciertamente necesario. Necesitamos un corazón puro, que no se enloquezca ante los propios deseo y necesidades, que sepa guardar las preciosas palabras que Dios no dirige, que nos ayude a contemplar esa realidad luminosa, en donde resplandecen los planes de Dios. Un corazón humilde que ocupa el primer lugar sin que nadie se dé cuenta, sin aspavientos. Un corazón luminoso, capaz de irradiar la luz que solo Dios puede dar. Un corazón como el de María, para poder llegar al Señor.
“En María, afirma el Papa Francisco,vemos que la humildad y la ternura no son virtudes de los débiles, sino de los fuertes, que no necesitan maltratar a otros para sentirse importantes. Mirándola descubrimos que la misma que alababa a Dios porque “derribó de su trono a los poderosos” y “despidió vacíos a los ricos” (Lc 1,52.53) es la que pone calidez de hogar en nuestra búsqueda de justicia. Es también la que conserva cuidadosamente “todas las cosas meditándolas en su corazón” (Lc 2,19). María sabe reconocer las huellas del Espíritu de Dios en los grandes acontecimientos y también en aquellos que parecen imperceptibles.”
Palabra de Vida Mes de Junio 2022
«Tú eres mi Señor, mi bien, nada hay fuera de ti» (Sal 16, 2) https://www.focolare.org/espana/es/news/category/parola-di-vita/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Junio 2022.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.