En estos días nos pidieron ayuda en oración por una mamá con cancer, ella está muy mal y además de eso tiene tres chiquitos que, en ese momento nos informaron no tenía a quién dejárselos si moría. ¡Terrible, verdad!
Esta mañana mi meditación me llevó al libro de Pete Wilson, Plan B y me identifiqué con la preocupación de esta madre al leer el siguiente texto: Si saber que Dios está presente no alivia tu dolor ni resuelve tus problemas ni contesta tus preguntas, ¿cómo ayuda?
Creo, dice el autor que esa es una pregunta válida. Y si todavía estás pensando con una mente tipo máquina expendedora, tal vez no te guste la respuesta. Y esta última frase me confrontó en lo más profundo. Y es que seamos sinceros querido lector; cuántas veces lo que ha guiado nuestra oración es precisamente esta mente tipo máquina expendedora, es el acudir al Dios bombero, como lo llaman algunos y peor aún aquellos que a veces tenemos la mentalidad de algo así como que “Dios me debe”
Todo esto lo puede causar la incertidumbre, la impotencia ante las circunstancias difíciles de la vida. Pero creo que como afirma Wilson, al fin de cuentas, simplemente queremos y necesitamos estar seguros de que Dios sabe lo que nos está pasando, que no hemos sido olvidados ni abandonados. Aun si no conocemos cuales serán los resultados de nuestras circunstancias actuales, existe una tremenda paz y consuelo que viene de eso.
Y Dios sí sabe. Is 53,3 describe al Hijo de Dios como varón de dolores, hecho para el sufrimiento. El sabe lo que es estar triste y sentirse desilusionado. El sabe lo que es sufrir y llorar. Y aunque nunca nos ha prometido quitarnos el dolor, El sí ha prometido estar justo a nuestro lado en medio de él. El sufre con nosotros. Se entristece con nosotros. Llora con nosotros. El sabe.
Así que, continua el autor, esta es una manera en que la presencia de Dios puede ayudarte mientras estás viviendo tu Plan B: puedes estar seguro de que no importa las malas que puedan ponerse las cosas, y no importa cómo te sientas, no estas solo…
Y aquí , el texto me dio la respuesta para esa mamá: El sabe por lo que estás pasando. El está justo a tu lado, compartiendo tu dolor, aun cuando tal vez no lo quite. Y El sabe lo que estás haciendo con tu vida, aunque tu no lo sepas.
Wow, esto me dejó tambaleando, e inmediatamente continua la respuesta, ahora para mi. ¿Puedes hacer una pausa por un momento y permitirte asimilar bien esta verdad? Permite que se asiente en tu mente y en tu corazón. Permite que te de fortaleza, valor, paz y consuelo.
Dios está contigo, justo ahora. En este preciso instante. No importa cómo te sientas. Sin embargo, para que eso pueda marcar una diferencia en tu vida, es posible que tengas que cambiar tu manera de pensar. Tal vez que tengas que renunciar a algunas expectativas sobre lo que Dios te debe y cómo se supone que sean las cosas.
Oremos
Sagrado Corazón de Jesús, te pido que nos enseñes cómo tener fe incluso en mi silencio. Te pido que me ayudes a transmitir fuerza y seguridad, sin palabras si así lo requiere la situación, a aquella persona que cree sentirse en la más agónica y dolorosa de las situaciones. Te pido que en medio de esta gran tempestad que ahora está viviendo, tú me utilices transmitir tu paz, calma y esperanza. Si no es con palabras, que un simple abrazo reemplace una palabra hueca y vacía. Que una mirada diga más que una aburrida y sin sentido oratoria de ayuda… Que una mano en el hombro diga más que un “estoy contigo” obligado, hueco y vacío. Que mis manos, mi pensamiento y hasta mi silencio mismo, puedan ser alivio a aquél ser que vive en un tormento constante; y que pueda encontrar en mí, con tu ayuda Señor, una fracción de la esperada paz que tanto necesita.
Padre celestial, te pido también paz en cada situación difícil de mi vida, pido eso para el consuelo relajante de Dios Todopoderoso que encenderá la serenidad en mi vida y así poder irradiarla en los que la necesiten. Amén
¡Sagrado Corazón de Jesús en vos confío porque se que me amas!
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Junio 2021
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.