Mirad que llegan días —oráculo del Señor— en que daré a David un vástago legítimo: reinará como monarca prudente, con justicia y derecho en la tierra. Jeremías 23
Gracias por esta dulce espera de la venido tuya hecho hombre que vendrá a sellar con su Sangre la Alianza Eterna que nos liberará y nos dará la heredad de Tu Reino. Grande eres Señor y eterna Tu Misericordia para con nosotros pecadores
Señor, Dios y Padre nuestro, del silencio de este amanecer viene la alabanza que es debida a ti, oh Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo. Es justo alabarte y bendecirte por todo y por tanto y darte las gracias, por el don de la vida, por nuestra familia, por el pan que podemos traer a nuestra mesa fruto del trabajo que tu nos has brindado. Gracias por nuestro país y por nuestra Iglesia, muy especialmente por el Papa Francisco.
Arrodillados ante tu presencia, nos reconocemos pecadores y te suplicamos nos perdones porque hemos pecado contra el cielo y contra Ti y no merecemos llamarnos hijos Tuyos, ten Misericordia por nuestros pensamientos negativos, las palabras pronunciadas sin afán de edificar, nuestros actos realizados no por darte Gloria, sino por darnos gloria y por todo lo que hemos malhecho con la Creación obra de Tus Manos.
Renueva nuestros corazones y protégenos, Señor, a nosotros tus hijos y guíanos, en la tarea que nos has encomendado. Vigílanos para poder servirte de manera correcta y ábrenos a Tu Espíritu, para recibir de ti los dones que necesitamos para alcanzar tu reino y dar testimonio de tu nombre. Ayúdanos en cada paso del camino. Que nuestras vidas se encomienden a tu cuidado, para que siempre encontremos fuerza en ti, Dios y Salvador nuestro.
Te encomendamos a todos aquellos que nos han pedido oremos por ellos, Tu conoces sus nombre y necesidades, ante tu presencia los presentamos para que se haga Tu Voluntad. También a nuestros gobernantes y todos aquellos que tienen en sus manos el poder de tomar decisiones, para como hijos tuyos se sometan a Ti. Te rogamos por nuestra Iglesia, en especial al Papa Francisco para que el Espíritu Santo lo siga bendiciendo.
Gracias Señor porque siempre acoges nuestras suplicas, hágase Tu Voluntad así en la tierra como en el Cielo.
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p style=”text-align: center;” data-removefontsize=”true” data-originalcomputedfontsize=”16″>Amén.
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Diciembre2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.