Señor mío, que mi corazón se abra a tu Palabra de forma sencilla, porque en la sencillez puedo apreciar las bondades y gracias que quieres darme. No es fácil cumplirte cuando el mundo me ofrece cosas “maravillosas”: tener muchas cosas, sobresalir, alcanzar el éxito material y los elogios de otros.
Pero tu gracia me basta, porque tu poder se manifiesta en la debilidad. Los humildes atrapan tu atención; por eso, haz mi corazón semejante al tuyo. Ayúdame a superar el miedo y mis dificultades, y limpia mi alma de emociones negativas de manera que, todas mis acciones, sean dirigidas por tu gracia y sabiduría.
Quiero descubrirte en lo más simple y alcanzar la alegría en lo que no es ostentoso. Abro los ojos y mi corazón y mi alma para sentirte en lo cotidiano.
Si quiero permanecer en tu rebaño, debo incluir la honestidad, honradez y sencillez en mi vida. Quiero contarme entre los que se fían plenamente de Ti.
Ayúdame a confiar en Ti como confía un niño, como se entrega y ama un niño en tus brazos consoladores que Lo resguardan y protegen de todo mal. Me propongo dejar de vivir para mí, salir de mi egoísmo y ser generoso en todo lo que hago. Con tu amor y tu inspiración, todo lo podré. Amén
Propósito para hoy.
Buscar crecer en la unión con Dios. Busca tu Biblia y lee el Salmo 74 completo.
Frase de reflexión.“Se necesita más fuerza para reparar que para construir, para recomenzar que para iniciar, para reconciliarse que para llevarse bien. Esta es la fuerza que Dios nos da”. (Papa Francisco, 21.08.2019)
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Julio 2020
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.