LITURGIA DE LA PALABRA
Introducción
Hoy celebramos las Temporas de petición por la actividad humana, día en que la liturgia nos invita a orar por el trabajo y sus frutos. Es un momento para que la Iglesia pida a Dios bendición sobre las labores humanas, agradezca por los dones recibidos y reflexione sobre el trabajo como participación en la creación divina. Estas jornadas suelen coincidir con el final de las vacaciones y las cosechas, para pedir protección y dar gracias por el esfuerzo humano y natural.
PRIMERA LECTURA del primer libro de Samuel 1, 10-18
En aquellos días, Ana, con el alma llena de amargura, se puso a rezar al Señor, llorando a todo llorar. Y añadió esta promesa: «Señor de los ejércitos, si te fijas en la humillación de tu sierva y te acuerdas de mí, si no te olvidas de tu sierva y le das a tu sierva un hijo varón, se lo entrego al Señor de por vida, y no pasará la navaja por su cabeza».
Mientras ella rezaba y rezaba al Señor, Elí observaba sus labios. Y, como Ana hablaba para sí, y no se oía su voz aunque movía los labios, Eli la creyó borracha y le dijo: «¿Hasta cuándo te va a durar la borrachera? A ver si se te pasa el efecto del vino».
Ana respondió: «No es así, Señor. Soy una mujer que sufre. No he bebido vino ni licor, estaba desahogándome ante el Señor. No creas que esta sierva tuya es una descarada; si he estado hablando hasta ahora, ha sido de pura congoja y aflicción».
Entonces Eli le dijo: «Vete en paz. Que el Dios de Israel te conceda lo que le has pedido».
Ana respondió: «Que puedas favorecer siempre a esta sierva tuya».
Luego se fue por su camino, comió, y no parecía la de antes.
Reflexión
Este texto nos destaca la fe, la confianza y la profunda oración de Ana (la madre de Samuel) quien con dolor de alma pide a Dios un hijo varón, y nos muestra cómo Dios escucha la aflicción del corazón y cumple sus promesas. El Señor, es Dios que da esperanza los que no la tienen. Ante la súplica de Ana, el sacerdote Elí respondió: Ve en paz y que el Dios de Israel te conceda lo que le has pedido: Este mensaje fue para consolarla después de que él la malinterpretara al verla orar en silencio, creyendo que estaba ebria. Posteriormente, Ana tuvo un hijo, Samuel, tal como había pedido en oración, cumpliendo el voto que hizo de entregarlo al servicio de Dios.
Ana, significa favor; ella fue una mujer fiel que experimentó adversidad, oró y su ejemplo nos enseña, en este día de petición por la actividad humana, qué podemos hacer cuando enfrentemos adversidad.
SALMO RESPONSORIAL 27, 1ab-2. 7. 8-9 (R.: 2a)
R. Escucha, Señor, mi voz suplicante.
A ti, Señor, te invoco;
Roca mía, no seas sordo a mi voz.
Escucha mi voz suplicante
cuando te pido auxilio,
cuando alzo las manos
hacia tu santuario.
El Señor es mi fuerza y mi escudo:
en él confía mi corazón;
me socorrió, y mi corazón se alegra
y le canta agradecido.
El Señor es fuerza para su pueblo,
apoyo y salvación para su Ungido.
Salva a tu pueblo y bendice tu heredad,
sé su pastor y llévalos siempre.
Reflexión:
El Salmista nos motiva, en un mundo en el que aprentemente todo se tambalea y todo cambia, en el que el hombre es inconstante y voluble, en el que nada es estable; oremos confiadamente al Señor pues El es nuestra Roca, El permanece cuando todo pasa; es el único que da seguridad y ofrece garantías. La firmeza de su Palabra. La garantía de su verdad, da tranquilidad y paz a nuestra alma
EVANGELIO según san Mateo 7, 7-11
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
—«Pedid y se os dará, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide recibe, quien busca encuentra y al que llama se le abre.
Si a alguno de vosotros le pide su hijo pan, ¿le va a dar una piedra?; y si le pide pescado, ¿le dará una serpiente? Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre del cielo dará cosas buenas a los que le piden!».
Reflexión
En el evangelio de hoy, Jesús nos invita a tener una relación de confianza con Dios, expresada en tres verbos: pedir, buscar y llamar. Esta promesa resalta el carácter bondadoso de nuestro Padre celestial, quien no cierra la puerta a aquellos que se acercan con sinceridad y fe.
Cuando nos acercamos a Dios con nuestras peticiones, es fundamental hacerlo con humildad, reconociendo que no siempre sabemos qué es lo mejor para nosotros. En la vida cotidiana y en nuestro trabajo, a veces pedimos soluciones rápidas a problemas complejos, sin detenernos a reflexionar sobre las posibles consecuencias de lo que solicitamos. En lugar de buscar resultados inmediatos, debemos aprender a confiar en el tiempo de Dios, que no es el mismo que el nuestro
El Papa Francisco nos invitó a reflexionar sobre si realmente oramos con valentía. «¿Cómo oramos? ¿Oramos con piedad y calma por costumbre o nos presentamos con valentía ante el Señor para pedir su gracia, para pedir aquello por lo que oramos?». Nuestra actitud es fundamental, explicó, pues « la oración sin valentía no es verdadera oración». Cuando oramos, necesitamos «la valentía de confiar en que el Señor nos escucha, necesitamos la valentía de llamar a la puerta… El Señor mismo dice: “El que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá”». El Papa Francisco preguntó: «¿Nos involucramos en la oración? ¿ Sabemos cómo llamar a la puerta del corazón de Dios?».
También nos pidió que oráramos por el Jubileo 2025. Peregrinos de Esperanza:
Señor, Padre que estás en el cielo, la fe que nos has donado en tu Hijo Jesucristo, nuestro hermano, y la llama de caridad infundida en nuestros corazones por el Espíritu Santo, despierten en nosotros la bienaventurada esperanza en la venida de tu Reino.
Tu gracia nos transforme en dedicados cultivadores de las semillas del Evangelio que fermenten la humanidad y el cosmos, en espera confiada de los cielos nuevos y de la tierra nueva, cuando vencidas las fuerzas del mal, se manifestará para siempre tu gloria.
La gracia del Jubileo reavive en nosotros, Peregrinos de Esperanza, el anhelo de los bienes celestiales y derrame en el mundo entero la alegría y La Paz de nuestro Redentor.
A ti, Dios bendito eternamente, sea la alabanza y la gloria por los siglos.
Amén.
Tomado de:
- Folleto La Misa de Cada Día.
- https://servicioskoinonia.org/leccionario/texto/5222TATEMP_4.html
- Biblia Latinoamericana
- Libro Busco Tu Rostro, autor Carlos G. Vallés
- https://es.catholic.net/op/articulos/18227/cat/727/las-temporas.html
- https://catholicpreaching-com.translate.goog/wp/learning-from-pope-francis-how-to-seek-knock-and-ask-in-prayer-first-thursday-of-lent-march-13-2014/?_x_tr_sl=en&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=tc
- https://www.iubilaeum2025.va/es/giubileo-2025/preghiera.html
Palabra de Vida Mes Noviembre. «Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios“. Mt 5, 9 https://ciudadnueva.com.ar/categoria/palabra-de-vida/
Recopilado por Rosa Otárola D, /
Noviembre 2025 2025.
“Piensa bien, haz el bien, actúa bien y todo te saldra bien”
Sor Evelia 08/01/2013.